La presentación en Atarfe será viernes 26 de mayo en el patio del Casino de Labradores  a las 8:30

Pedro Ruiz-Cabello Fernández (Atarfe, Andalucía, 1962) es autor de nueve novelas. Se dio a conocer como poeta en el programa radiofónico Poesía 70, dirigido en Granada por Juan de Loxa. La poesía desde entonces fue una vocación que no ha abandonado nunca. Para él la literatura es un ejercicio constante, una pasión que da solidez y sentido a su vida.

Pedro Ruiz-Cabello Fernández es profesor de Lengua y Literatura; después de haber pasado por varios destinos, ejerce actualmente en el IES Ilíberis de Atarfe, donde además de la docencia desarrolla actividades de teatro.

Se inició muy pronto en el campo de las letras, participando en el espacio radiofónico Poesía 70 que dirigía Juan de Loxa. Ha publicado artículos de literatura en la revista Extramuros, uno de los principales órganos de la vida cultural granadina.

Su primera novela, Nunca será la muerte como los hombres dicen, publicada en 2001, significó su arranque en el mundo de la narrativa. Tras ella han aparecido cinco más, con las cuales se ha asegurado su vocación como narrador. Tiene, además de las publicadas, otras obras inéditas que son testimonio de un ejercicio diario, sin el cual no sabría probablemente vivir.

Su condición de poeta, apuntada en sus inicios, es una cualidad que no lo ha abandonado nunca, como se puede comprobar en buena parte de sus novelas. El arte de la descripción, profusamente cultivado en ellas, es otro de sus rasgos más característicos.

Desde aquí animamos a Pedro ya que sus opiniones sobre la presentación del libro en Atarfe ha estado lelna de muchas inquietudes y dudas tal como refleja, el mismo, en su facebook:

«Hay veces en que no sé por qué escribo. Lo hago ya como una costumbre, como un modo de liberar mis sentimientos, como una manera quizá de ser feliz. No me gustaría recurrir a presentaciones para poder vender los libros; es una forma de obligar a la gente a que los compre y a que los lea. La lectura debe ser también una necesidad. Pensar que lo que escribo no va a satisfacer a los lectores me causa desazón. Es posible que mis novelas no sean interesantes o que solo interesen a mí. Son la verdad un producto de mi mente, de mis obsesiones más íntimas. Últimamente estoy un poco preocupado por ello; hay quien dice que no debería presentar en Atarfe, donde no gustaría tanta repetición. Quizá me he equivocado con publicar el libro. Como un principiante, me he dejado arrebatar por la ilusión. Tendré que pedir disculpas si no se cumplen las expectativas que he generado. Lo único que puedo asegurar, a pesar de mis dudas, es que cada día me esfuerzo en escribir mejor, en exprimir todas las posibilidades que tengo. La escritura es un ejercicio costoso; los aciertos son solo fruto de un trabajo tenaz.«

y en otra comunicación:

«La literatura es una fiesta y quiero que la presentación del libro también lo sea, y por eso lo voy a ofrecer como un regalo a los que asistan. No me importa perder. Las pérdidas económicas no son pérdidas, son ganancias de amigos. Es verdad que mi libro tiene errores y faltas quizá imperdonables, pero también tiene aciertos, y quiero que esos aciertos sean valorados por los lectores. El mayor premio para alguien que escribe es que lo lean. Ojalá sirva para algo lo que escribo. Lo he pensado mejor: voy a presentar el libro.«

Y así le contestaba José Vaquero Sanchez,( entre otros) animándole  a la presentación:

«Para el escritor la escritura es una necesidad vital. El escritor no puede vivir sin escribir. Es como una adicción. Pero nadie escribe para sí mismo, necesita comunicarlo a los demás. Para que los demás también gocen con su creación. La presentación es un modo de exponer la obra creativa a quien le interese, y a nadie se le obliga a comprar. Adelante, Pedro, presenta tu novela en Atarfe.»

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