Nos dejó José Casado Mateos, Pepe Villín. Se podía decir que Pepe fue lo que hoy algunos llaman emprendedor. Su padre era comerciante en su pueblo natal Guadix y poseía una alpargatería que proveía al ejército.

Llegado a Atarfe comenzó a trabajar en la cementera, la famosa Portland quién le encargó que fuera a Granada a comprar una bicicleta para el cartero de la fábrica.

Aquel hecho supuso un cambio en su trayectoria profesional, ya que la tienda de bicicletas le ofreció una comisión de 25 pesetas por lo que se decidió a montar su propia tienda de bicicletas en Atarfe, siendo el “Pollero” su mecánico.

Las bicis fueron cambiadas por máquinas de coser y electrodomésticos, entre otras mercancías, vendiendo las primeras televisiones en Atarfe. Tan bien le fue en el negocio que la casa Westinghouse le ofreció ser su representante en Granada, por lo que montó una tienda en la Gran Vía de la capital, esquina Azacayas.

Durante ese periodo de su vida residía en Granada, pero a los 53 años sufrió un infarto y dejo toda su actividad, volviendo a su Atarfe natal en donde ya sus hijos habían instalado la tienda de muebles a la que llamaron Al-Ándalus. Primero en la calle Nueva y posteriormente en la Real, Pepe acompañaba a sus vástagos, estando al tanto de los clientes de aquellos establecimientos con su saber y educación.

El texto de esta gacetilla ha sido elaborado al alimón con Paco Rivera, quien compartió muchas tardes con Pepe en aquella tienda de la calle Real.

Curiosidades elvirenses.

 

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Gacetilla y curiosidades elvirenses
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