GRA095 BARCELONA, 09/11/2014.-El presidente de la Generalitat, Artur Mas, acompañado de su esposa,Helena Rakosnik, en la Scola Pia de Balmes donde depositó su papeleta en la jornada participativa, sin carácter vinculante, convocada hoy para que los catalanes se pronuncien sobre la independencia de Cataluña. EFE/Alberto Estévez

Estamos con la vista puesta en las elecciones de este domingo 27 de septiembre. No sólo los catalanes por conocer quién será el próximo President de la Generalitat, sino todos los españoles están pendientes y preocupados por saber si el reto de la lista independentista de Convergencia y Esquerra consigue sus objetivos o no.

El próximo domingo 27 de septiembre se decidirán muchas cosas en Cataluña. El posible triunfo de las fuerzas independentistas podría acabar con la democracia de la transición y obligarnos a crear un nuevo marco de convivencia para España en el que, quizás, ya no estuviera incluida Cataluña. Con todo, el órdago de Mas y Junqueras con Junts pel sí, les puede salir caro, ya que cualquier resultado que no sea un triunfo claro, les dejaría en una situación compleja, porque difícilmente podrían defender su hoja de ruta hacia la soberanía, sin el respaldo, como mínimo de la mitad de la población catalana. Por ende, no hay que olvidar que a pesar del carácter plebiscitario que han querido otorgar a las elecciones, lo que realmente se vota es la composición del Parlamento catalán y quién será el nuevo President de la Generalitat. Una mayoría insuficiente de Junts pel sí, les dejaría en una posición incómoda de gobierno, dado que la lista soberanista cuenta con muchos candidatos independientes, con una disciplina de voto por definir y la amalgama de dos formaciones como Convergencia y Esquerra, que política, económica e ideológicamente están en las antípodas la una de la otra.
Para los partidos con una perspectiva nacional: PP, PSOE, Ciudadanos e incluso Podemos e IU, que comparecen unidas con ICV en estas elecciones bajo el paraguas de Catalunya sí que es pot, estos comicios pueden marcar una tendencia de cara a las generales de fin de año. Un punto de partida en la carrera hacia la Moncloa, más allá de vencer a los soberanistas en el pulso que estos han planteado.
Para la CUP y Unió esta es la hora de la verdad, el momento de saber si las alternativas que representan sus propuestas tienen verdadera cabida en el complejo marco de la política catalana o no.
Desde Encuestamos hemos querido presentar el Sondeo Electoral definitivo del 27 S, un análisis independiente que no ha sido financiado por ningún partido o grupo de presión y que se ciñe a las respuestas de 844 ciudadanos catalanes, mayores de 18 años, que nos han confesado a quién piensan votar el 27 S.
De menor a mayor, un ajustado 2’3 % de los catalanes sostiene que votará a Unió Democrática, lo que la sitúa justo en el límite del acceso al Parlament. La CUP se consolidaría como alternativa, mejorando sus registros anteriores con un estupendo 8’3 % de los votos, muchos de sus votantes vienen heredados desde ERC, donde no todos han entendido la alianza contra natura de su partido con Artur Mas.
Un razonable 10’5 % de los encuestados responde que votará al PP catalán del siempre polémico Xavier García Albiol. Fuerte incremento, en relación con los resultados de 2012, para Ciudadanos, encabezados por Inés Arrimadas, que lograrían un histórico 13’3 % de los sufragios.
La tercera plaza sería para el PSC – PSOE con un 13’4 % de los votos, con Miquel Iceta remontando los peores pronósticos, al ritmo de sus bailes y de su eficaz actuación en el debate televisado de los candidatos.
La segunda posición sería para la coalición de izquierdas Catalunya Sí que es Pot, con un espléndido 14’6 % de los sufragios, superando también las expectativas previstas.
La lista independentista Junts pel Sí, sería la triunfadora de estas elecciones, ya que la votaría un notable 35’7 % de los catalanes. Una victoria holgada pero que les dejaría lejos de la mayoría absoluta que les hubiera legitimado para continuar adelante con el proceso soberanista y con la necesidad de encontrar un socio más para poder formar un Gobierno estable.

Para poder dar una dimensión más fácilmente comprensible a los datos que arroja este Sondeo Electoral de 27 S desarrollado por Encuestamos, hemos procedido a trasladar los resultados de cada partido o coalición a una horquilla de escaños en el futuro Parlament de Catalunya.
Unió Democrática se movería en el filo de la navaja, ya que fluctuaría entre lograr dos diputados o quedarse sin representación. La CUP obtendría entre 10 y 12 escaños, mientas que el PP catalán lograría de 12 a 14 diputados. Tanto el PSC – PSOE como Ciutadans conseguirían, según las previsiones de nuestra encuesta, entre 17 y 19 actas en el Parlament.
Los representantes de Catalunya sí que es pot serían de 18 a 21 diputados, aunque su buen resultado porcentual no estaría seguramente refrendado por un número acorde de escaños, ya que la mayoría de sus votantes se concentran en las grandes ciudades donde la actual Ley Electoral penaliza a sus habitantes con respecto a los de las zonas menos densamente pobladas.
La lista ganadora, Junts pel Sí, cosecharía entre 54 y 57 escaños, lejos de los 68 necesarios para obtener la mayoría absoluta en el Parlament.

El Sondeo Electoral elaborado por Encuestamos nos deja algunos titulares que se alejan de los resultados expuestos en otras encuestas sobre las elecciones catalanas publicadas hasta la fecha.

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La CUP logra sus mejores resultados históricos captando votantes de Esquerra Republicana desencantados con el pacto que han cerrado con Artur Mas y su partido.

El PP y el PSC – PSOE no se hunden tanto como se decía y por el contrario demuestran contar con un grupo de votantes fieles, incluso en los peores momentos.

Ciudadanos mejora sus resultados de las anteriores elecciones catalanas, pero no hasta el punto que auguraban algunas encuestas.

Catalunya sí que es pot obtiene buenos resultados, especialmente en las áreas urbanas, refrendando los datos que sus plataformas obtuvieron en las municipales, aunque son penalizados por la ley electoral vigente, en el tema del reparto de escaños.

Junts pel Sí gana pero lejos de lograr una mayoría absoluta en número de votos y puede que tenga dificil alcanzar una mayoría estable en el Parlament que les permita gobernar.

La noche del 27 S podremos contrastar los datos de este y otros sondeos electorales y descubrir hasta qué punto nos hemos acercado a la opinión real del electorado catalán.

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