«Es, así en general, una mierda de año, efectivamente. Pero hay que remar, a ver si 2021 termina con otras palabras más apetecibles», la opinión de Carles Francino

Ya sé que era previsible, pero no deja de impactar que las doce candidatas a ser elegidas como palabra del año en España supongan casi un monográfico sobre la pandemia. De hecho, aparece la propia palabra pandemia en la lista; también están coronavirus, vacuna, confinamiento, covid, infodemia… y algunas derivadas interesantes. Está TikTok, por ejemplo, hacer un tiktok, en alusión a esta red social; está resiliencia, está conspiranoia, está teletrabajo…y aparece “estatuafobia”, que es la única no vinculada directamente con el coronavirus.

Por lo demás, supone un ejercicio curioso retroceder hasta 2013, que es cuando la Fundéu puso en marcha esta iniciativa de la palabra del año, porque eso nos sirve para enhebrar un relato de momentos, de fenómenos distintos en nuestra historia reciente. En 2013, por ejemplo, la palabra elegida fue “escrache”, después vinieron “selfi”, “refugiado”, “populismo”, “aporofobia” y “microplástico”, hasta llegar a “emoji” que fue la palabra de 2019. En esa lista aparecen reclamos sobre la desigualdad, la protesta, el nuevo lenguaje digital, el medio ambiente… Y en este 2020, desde luego, será sobre la salud.

Claro que, para resumen seco y contundente, para definir de verdad y con precisión lo que ha sido este año, pues yo creo que nos sirve la palabra que han elegido los lectores del diario británico ‘The Guardian’. Y eso que cuando votaron aún no sabían lo de la cepa nueva que ha obligado a cerrar Londres y a dejar prácticamente aislado el Reino Unido. ¿Saben cuál es esa palabra? Mierda.

Porque es, así en general, una mierda de año, efectivamente. Pero hay que remar, a ver si 2021 termina con otras palabras más apetecibles.

CARLES FRANCINO

CADENA SER

https://cadenaser.com/programa/2020/12/21/la_ventana/1608560914_777176.html

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