«EL COLAPSO DE LA ATENCIÓN PRIMARIA: una situación generalizada» por Maria Serra

La Mesa en Defensa de la Sanidad Pública, MEDSAP, ha denunciado el colapso que se viene produciendo en la Atención Primaria en Granada. Una realidad cada vez más común y que afecta a toda la sociedad española.

Hablan de un plan “irreal, inflexible y no adaptado”, además de la insuficiencia de la contratación de rastreadores y epidemiólogos. La crisis de la covid-19 solo ha evidenciado un problema que ya existía anteriormente: la precariedad de la sanidad pública. Gran parte de este problema se debe al intento de la privatización de nuestra sanidad, denunciado reiteradamente por MEDSAP y numerosas asociaciones de interés público. Actualmente, la falta de accesibilidad a los centros de salud y la inexistente atención presencial es uno de los problemas más presentes.

Esta crisis ha exigido una adaptabilidad de la sanidad y supone una oportunidad para renovar y exigir responsabilidades en cuanto a recursos humanos e infraestructuras. Sin embargo, el resultado han sido los cierres de los centros de salud, la imposición de la atención telemática y precaria y una reducción de personal sanitario.

Desde el Sindicato de Enfermería en Andalucía, SATSE, reclaman al Servicio Andaluz de Salud (SAS) una incorporación inmediata de medidas para evitar el colapso. Otro gran problema añadido es que a las actividades rutinarias que los enfermeros asumen se han sumado la recogida de muestras PCR, seguimiento de pacientes con Covid-19 etc.

Según los datos del SATSE, actualmente hay tan solo 4.900 enfermeros de Equipos Básicos de Atención Primaria y 966 en los Dispositivos de Apoyo. Andalucía se encuentra por debajo de la media con 4’13 enfermeros por 1000 habitantes, mientras que la ratio europea es de 8’8 enfermeros por 1000 habitantes. Esto muestra la deficiencia que sufre nuestro sistema sanitario y la falta de medios que impiden la adaptabilidad de la sanidad y una mayor calidad de la atención al ciudadano.

Mientras todo esto ocurre (que no es un problema nuevo sino acumulado), la Junta se limita a decir que el colapso de la Atención Primaria durará “largo tiempo”. Las largas colas en los centros de salud, las llamadas sin respuesta y la baja calidad de las citas telefónicas (que tardan 2 semanas en dar) será una constante en nuestro sistema, cada vez más castigado por la pasividad política.

Esta pasividad ocurre cuando no hay negocio rentable, situación similar que nos recuerda al panorama de la educación pública. El otro dia leía una entrevista a la profesora Olga García, una de las autoras del libro ‘La escuela vaciada. La enseñanza en la época pospandémica’. En ella contaba que “bajo los planteamientos neoliberales de que todo lo que es público tiene que convertirse en un negocio, poco futuro le queda a la escuela pública y a sus alumnos y profesores”.

Algo parecido con nuestra sanidad; todo aquello que vemos en nuestro pueblo a nivel local se extrapola a nivel nacional con carencias cada vez más graves. Es un problema estructural que viene de un largo tiempo atrás: falta de personal, inexistencia de vacantes MIR (que no falta de profesionales sanitarios), contratos precarios, carencia de los recursos necesarios y un largo etc.

Testimonios de médicos de familia en Madrid por Olga Rodríguez vía elDiario.es: https://www.eldiario.es/sociedad/medicos-familia-madrid-achicando-agua-sistema-naufraga_1_6233597.html

Entrevista a la profesora Olga García por Miguel Muñoz vía Cuarto Poder: https://www.cuartopoder.es/espana/educacion/2020/09/27/no-hay-futuro-para-la-escuela-publica-con-estos-parametros-neoliberales/

Sobre la falta de médicos, plazas MIR, contratos precarios y necesidad de especialidades por Yolanda García vía Newtral: https://www.newtral.es/faltan-medicos-espana-mir/20200923/