Cómo combatir picaduras de medusas y peces araña
Se acercan a las costas arrastradas por las olas o para completar su ciclo vital, y cada vez son más abundantes, por eso la prevención ante las medusas debe ir en aumento.
En realidad, estas criaturas marinas no pican: el mero contacto de sus tentáculos con la piel causa los temidos síntomas (aparición de manchas rojas, dolores y espasmos musculares, entumecimiento, etcétera). El veneno de las células urticantes de las medusas actúa hasta 48 horas después de que hayan muerto, por eso es importante evitar el contacto incluso cuando la medusa se encuentre sin vida en la arena.
Evitar el baño en aguas infestadas, nadar en playas en las que haya socorristas y utilizar un traje completo de neopreno si se van a realizar inmersiones en el agua son precauciones básicas. También es recomendable usar cremas protectoras con extracto de plancton, ya que evitan que se produzca la “picadura”. Según los expertos, remedios caseros como aplicar hielo, agua dulce o incluso orina en la zona afectada por la “picadura” no solo no son de ayuda a la hora de paliar los síntomas, sino que pueden agravarlos. Sí resultaría eficaz, en cambio, el vinagre (ácido acético), ya que ayuda a eliminar los restos de tentáculos que puedan hallarse en la piel de la víctima.
Según Cristina Villegas, del Servicio de Dermatología del Hospital Sanitas La Moraleja, «las picaduras de medusas producen una reacción tóxica que suele ser leve, pero en un pequeño tanto por ciento pueden producir reacciones alérgicas graves». La ortiga de mar (Chyrsaora quinqecirrha) es una de las medusas más activas en las costas del golfo y del Atlántico; también son frecuentes las “picaduras” de melena de león (Cyanea capillata) y de Fisalia o carabela portuguesa (Physalia physalis), de las más peligrosas. Estos son los principales síntomas que causa su veneno:
Ortiga de mar:
- Erupción cutánea, si el contacto con los tentáculos ha sido leve.
- Calambres musculares.
- Dificultad respiratoria, en casos graves.
Melena de león:
- Dificultades para respirar.
- Calambres musculares.
- Ardor y formación de ampollas en la piel, cuando la zona en contacto con la medusa es elevada.
Carabela portuguesa:
- Mancha roja en la zona afectada.
- Dolor de cabeza, en el abdomen, en el pecho o en las extremidades.
- Espasmos musculares.
- Sensación de entumecimiento y debilidad.
- Alteraciones en el pulso.
- Rinorrea y ojos llorosos.
- Dificultades para tragar alimentos.
- Sudoración excesiva y desmayos: ocurren en los casos más graves.
Cómo actuar ante una picadura de medusa
- Retirar a la víctima del agua y estabilizar las funciones vitales.
- Inmovilizar la parte afectada por la “picadura”.
- Lavar la zona con agua salada.
- Aplicar compresas frías para paliar el picor y el dolor.
- Retirar el tentáculo clavado, en el caso de que lo haya, utilizando guantes, para evitar que el veneno de la medusa afecte a la persona que realiza la extracción.
- Utilizar ácido acético (vinagre) al 5 por ciento, ya que facilita la eliminación de las células urticantes de las medusas.
- Aplicar corticoides locales.
- Si se desea acelerar el proceso de curación, es posible tomar antihistamínicos orales.
Cómo actuar ante una picadura de araña de mar
Los peces araña también pueden estropearnos un día en la playa. Así se debe proceder si se produce una picadura:
- Aplicar calor sobre la zona afectada, ya que la toxina es termolábil.
- Extraer el aguijón y desinfectar la piel.
- Administrar analgésicos en el caso de que el dolor sea intenso.