Renta 2016: Así son los impuestos de las comunidades autónomas que menos recaudan

En total, las comunidades autónomas mantienen este año en vigor 79 impuestos propios, que por lo general suelen dar problemas. Junto a su poco efecto recaudatorio, estas tasas suelen ser una fuente de litigios y conflictos para cada región ya que gravan de distinta forma temas que ya cuentan con tributos estatales.

Las tasas menos rentables

Entre los impuestos de las comunidades autónomas que recaudaron menos en 2015 destaca la tasa que grava las emisiones de gases en el sector industrial de Cataluña, con el que la región se embolsó menos de 120.000 euros. Le sigue de cerca el impuesto de Murcia sobre los premios del bingo, que recaudó apenas 238.500 euros.

Además, las tasas de los depósitos de residuos en vertederos de Cantabria y la que recauda con las bolsas de basura de un solo uso en Andalucía tampoco son muy rentables para estas comunidades: con los dos impuesto estas regiones se embolsaron menos de 350.000 euros en 2015 (ver gráfico).

El 2,2% de la recaudación en España

Las comunidades autónomas exprimen su capacidad tributaria. Actualmente cuentan con 79 impuestos propios, muchos de carácter medioambiental, pero cuya capacidad recaudatoria es escasa: en total, los ingresos obtenidos por estas tasas ascendieron hasta los 1.967 millones de euros en 2015, una cifra que sólo representaron el 2,2% de los ingresos tributarios totales en España, de 88.639 millones de euros.

Es una cifra recogida por el «Panorama de la Fiscalidad Autonómica y Foral de 2017», elaborado por el Consejo General de Economistas Asesores Fiscales Reaf-Regaf. Señala además que en algunos casos, es muy probable que los ingresos por impuestos propios no lleguen a cubrir los costes derivados de su establecimiento y recaudación.

En este contexto, los impuestos propios de las comunidades autónomas redujeron su recaudación en un 5% en 2015 respecto al año anterior: los tributos propios bajaron 101,8 millones de euros.

Entre los 79 impuestos autonómicos, algunos están en suspenso o han sido declarados inconstitucionales. De la totalidad de estas tasas regionales, el 77,3% están relaciones con el agua.

Cataluña, a la cabeza

De todas las comunidades, Cataluña es la que cuenta con más impuestos propios, con un total de 14 tasas. Con ello, esta región es la que más recaudó el año pasado con este tipo de impuestos: un total de 588, 8 millones de euros. La cifra supone el 29,9% del total recaudada en España con los impuestos autonómicos.

Junto a la tasa por los gases industriales ya mencionada, Cataluña cuenta con otros ocho impuestos relacionados con la protección del medio ambiente. Además, tiene un gravamen de protección civil, una tasa sobre grandes establecimientos comerciales y otra sobre las estancias en establecimientos turísticos.

Por último, la comunidad catalana cuenta con un canon sobre la provisión de contenidos por parte de prestadores de servicios de comunicaciones electrónicas y de fomento del sector audiovisual y la difusión de la cultura digital, así como una tasa que grava las viviendas vacías.

Tras Cataluña, Andalucía y Asturias completan el «top 3» de las comunidades con más número de este tipo de impuestos, con 8 y 7 tasas propias, respectivamente. En 2015 recaudaron con estos impuestos111,3 millones y 82,9 millones de euros. Estos importes suponen el 5,7% y el 4,6% de los ingresos tributarios propios totales en España.

Madrid, la comunidad con menos ingresos

Frente a Cataluña, Madrid es la comunidad autónoma que menos recauda con sus impuestos propios. En total, la región tiene cuatro tasas de este tipo: una tarifa de depuración en aguas residuales, un impuesto sobre la instalación de máquinas en establecimientos de hostelería autorizados, otro sobre depósito de residuos y un recargo sobre el Impuesto de Actividades Económicas.

En total, la comunidad madrileña recaudó 6,23 millones de euros en 2015 con estas tasas, el 0,3% de los ingresos tributarios propios en España.

Las comunidades con menos tasas propias

En el lado de las comunidades con menos impuestos propios destacan Castilla-La Mancha y Castilla y León, ya que cuentan con tan sólo dos tasas de este tipo. La primera tiene una tasa de sobre determinadas actividades que inciden en el medio ambiente y un canon eólico; mientras que Castilla y León cuenta con un impuesto sobre la afección medioambiental causada por determinados aprovechamientos del agua embalsada, por los parques eólicos y por las instalaciones de transporte de energía, y también con una tasa sobre la eliminación de residuos en vertederos.

Los importes recaudados por ambas comunidades son escasos, tan sólo obtuvieron 15,6 y 66,7 millones de euros, respectivamente con estas tasas en 2015.