24 noviembre 2024

En homenaje a los camareros del Suizo, para reclamar un convenio justo para la Hostelería

Recuperamos estas imágenes en homenaje a aquellos camareros y camareras del añorado Suizo, impecables en su vestimenta, exquisitos en el trato, profesionales…, como ahora lo son y tratan de serlo los trabajadores y trabajadoras de la hostelería, que reclaman la firma de un convenio justo y digno, bloqueado por la patronal desde 2014. Una crónica de Juan Ferreras, que firma también las imágenes.

Cuando Granada aún una ciudad habitable, -lo que tratamos de recuperar entre todas y todos-, el turismo era incipiente y no formaba parte del  paisaje y los monumentos, ni las terrazas invadían calles y plazas, el café Suizo era un ejemplo entrañable de servicio profesional y pulcro.

El café Suizo, allá por los años ochenta, con su piano sonando al fondo, fue centro de convergencia de la sociedad clásica de Granada, aquella burguesía, con las nuevas generaciones, que aportaban aire fresco. Un curioso choque cultural, que emulaban en la distancia al café Gijón de Madrid, también desaparecido.

Con sus chaquetillas y camisas inmaculadas, la pajarita negra, y ellas con sus delantales blancos y cofias, la cortesía adecuada, sin meterse en tus asuntos, salvo si eras cliente o clienta habitual, y así se lo reclamabas, los camareros del Suizo fueron una institución, que recuperamos para alertar de la necesidad de un convenio digno para la Hostelería.

En tiempos de bonanza para los empresarios del sector, con Granada abarrotada los fines de semanas, puentes…los trabajadores y trabajadoras crean riqueza, muchos y muchas en unas condiciones indignas, sin contrato, sin horas extras remuneradas y jornadas laborales interminables de 12 o 14 horas, que el empresario se niega a admitir.

La patronal propone un recorte del nueve por ciento de la masa salarial cada año de un sueldo congelado desde 2014, la reducción de vacaciones, la congelación salarial o la distribución irregular de la jornada…

Es intolerable que Granada que vive y presume del turismo, del que se vanaglorian las instituciones, no tenga a sus trabajadores y trabajadores de la hostelería, el principal sector, con unas condiciones regladas.

Los camareros del Suizo en el recuerdo. Porque la calidad tiene un precio, convenio en el sector de Hostelería, ya