El 16 de noviembre se celebró el día internacional del Patrimonio Mundial, ya que hace ahora 45 años que se firmaba en París la Convención sobre Patrimonio Mundial Cultural y Natural, que sentaba las bases para desarrollar este tipo de protección cultural.

Se dividen en tres categorías: bienes culturales, naturales y mixtos. Son lugares, monumentos o sitios que están considerados excepcionales, universales y únicos por sus características.

España es el tercer país del mundo con más bienes declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO. Junto a monumentos y espacios naturales, la UNESCO también extiende su protección, mediante la declaración de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, a fiestas, artes y tradiciones que constituyen parte del acervo cultural. Nuestra universal Alhambra y el flamenco forman parte de este catálogo de bienes.

Ilustramos este texto con una fotografía de mediados de la década de los noventa del siglo pasado de nuestra calle Real. Unos pisos se están levantando sobre el solar que ocupaba anteriormente la casa donde se encontraba la fábrica de hielos de Miguel Moles y la zapatería de Antonio Rosillo.

Vemos una cabina, extraño elemento urbano en la actualidad y que hasta hace pocos años formaban parte del mobiliario de nuestros pueblos y ciudades. También los olmos se mantienen como parte del paisaje de la calle. Expedita la acera derecha de obstáculos, la perspectiva de la imagen imposibilita ver al completo la torre de la iglesia.

Reflexionemos sobre lo ocurrido y hagamos un pacto para conservar el patrimonio que los atarfeños tenemos. Se lo debemos a las generaciones venideras.

Curiosidades elvirenses.

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