En días pasdos hicimos referencia al paso de SANTA ANA donde antiguamente siglo XIX se encontraba el cementerio de Atarfe. Hoy hacemos un recorrido òr la transformación de ese paseo.

Esta fotografía perteneciente a la colección de Sebastián Aguayo data de los años veinte del siglo pasado. Este fotógrafo, al cual debemos infinidad de instantáneas de esa época tenía un estudio en la calle Cedazos. La fotografía forma parte del coleccionable “Atarfe, memoria gráfica de una ciudad”.

Pero centrándonos en esta imagen, presenta infinidad de detalles que nos invitan a contemplarla detenidamente, sin prisa, saboreando cada uno de los mismos. Contextualizando, nos encontramos en el Paseo de Santa Ana y la imagen de la patrona se encuentra en la puerta de la ermita. Por los vestuarios que portan los personajes, nos sugieren que nos encontramos en otoño, más que en julio. Hay paraguas pero parece que son para protegerse del sol que no de la lluvia. Una banda de música, todos sus componentes con sombrero, se puede ver en la parte inferior izquierda. En la comitiva procesional se observan varios estandartes; el primero de ellos se asemeja bastante al que se saca actualmente. El segundo queda muy difuso.

Hay en la parte superior izquierda de la imagen, una estructura de madera, en donde ondean dos banderas. ¿Son los “patos”?………

Destacan dos aspectos urbanísticos en la fotografía. Uno de ellos es que no existía la explanada tal como hoy la conocemos. La ermita se levantaba sobre una colina, más estrecha que la actual, continuando con un desmonte, sin solución de continuidad hacía el camino de Pinos. El otro es la menor altura de la torre de la ermita. Debido a los terremotos de 1956, la torre sufrió desperfectos y fue reparada por la Dirección General de la Vivienda. Hasta la última remodelación (principios siglo XXI), existía una placa en la fachada informando de aquel hecho.
Al fondo, un horizonte limpio, sin edificios en lontananza…….

«A las ocho de la tarde, en el Paseo de la Ermita de Santa Ana, donde se ha erigido, tendrá lugar el acto de descubrir y bendecir la Imagen y Monumento al SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS y la consagración de este vecindario a su divina protección, con asistencia de las primeras Autoridades Eclesiásticas, Civiles y Militares de Granada y de esta población, especialmente invitadas para tan solemne ceremonia, […]»

Así reza en el programa de los actos a celebrar en Atarfe con motivo de la inauguración del Monumento e Imagen erigidos por suscripción popular al Sagrado Corazón de Jesús, para los días 1 al 4 de junio de 1944.

Texto extraído del artículo titulado “Atarfe, por el Sagrado Corazón de Jesús” de los hermanos Pino Ortega, publicado en el especial de las fiestas de IDEAL del año 2007.

En la Gacetilla del pasado 1 de julio nos acercamos a conocer el proceso para levantar un monumento al Corazón de Jesús en junio de 1944. Hoy nos hacemos eco de los actos programados para tal fin los días 1, 2, 3 y 4 de junio de 1944.

Programa
De los actos que habrán de celebrarse en ATARFE, con motivo de la inauguración del monumento e imagen erigidos por suscripción popular al Sagrado Corazón de Jesús del 1 al 4 de junio de 1944.

Días 1, 2 y 3 de Junio
Durante estos días tendrá lugar en la Iglesia Parroquial, a las once de su noche, un solemne Triduo en honor del Sacratísimo Corazón de Jesús, durante el cual ocupará la Sagrada Cátedra el R. P. López, S. J.

Día 4
A las diez y media de la mañana, se celebrará solemne Misa en la referida Iglesia Parroquial que será oficiada por la Capilla de Música local, verificándose a continuación la imposición de insignias a la Rama de hombres y mujeres de Acción Católica.

A las ocho de la tarde, en el Paseo de la Ermita de Santa Ana, donde se ha erigido, tendrá lugar el acto de descubrir y bendecir la Imagen y Monumento al SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS y la consagración de este vecindario a su divina protección, con asistencia de las primeras Autoridades Eclesiásticas, Civiles y Militares de Granada y de esta población, especialmente invitadas para tan solemne ceremonia, acto que será amenizado por la Banda de Música del Frente de Juventudes local.

Otros actos

Este mismo día, a las seis y media de la tarde y con ocasión de su estancia en la localidad, el Excmo. Sr. Gobernador Civil y Jefe Provincial del Movimiento hará una visita a la CRUZ DE LOS CAÍDOS POR LA PATRIA, depositando una corona al pie de la misma, y a continuación tendrá lugar en el Salón de Sesiones del Ayuntamiento una recepción, visitando seguidamente la Casa de F. E. T. Y de las J. O. N. S. y los diferentes departamentos Sindicales, Hermandad de Labradores y el Cuartel del Frente de Juventudes, donde revistará el grupo de flechas, que desfilarán en su honor con la Banda de Música de la Organización.

También tendrá lugar este día un reparto de pan a los necesitados de la localidad, contando para ello con el ofrecimiento de harina hecho por algunos agricultores, de sus reservas particulares de dicho producto.

Así mismo se dará una comida extraordinaria en los locales de Auxilio Social.

Atarfe fue consagrado el domingo, 4 de junio de 1944, al Sagrado Corazón de Jesús. La asistencia del señor Arzobispo y señor Obispo auxiliar, la presencia del gobernador civil y el fervor de la multitud congregada en la explanada de la ermita de Santa Ana contribuyeron a dar brillantez a este día.

Céntimo a céntimo, peseta a peseta, fue reunido el importe de cincuenta mil pesetas que costó la ejecución material del proyecto. Todos los vecinos de Atarfe pusieron algo suyo para hacer realidad la idea que un día tuvieron un grupo de convecinos.

Atarfe amaneció engalanado. Era un día de fiesta, en el que los atarfeños se congregaban a primera hora de la mañana en el templo parroquial para asistir a la función religiosa que había de celebrarse en honor del Sagrado Corazón de Jesús; y que ofició el párroco, don Salvador Prados junto con el padre Murillo.

Alrededor de las siete de la tarde hizo su entrada en Atarfe el gobernador y jefe provincial, don José María Fontana. Acompañado del alcalde de Granada, señor Gallego y Burín, y del presidente de la Diputación, don Antonio Robles.

El gobernador civil fue recibido por la corporación municipal en pleno, a cuyo frente se hallaba el alcalde, don Enrique Ruiz-Cabello Osuna; además, asistieron el juez municipal, don Eduardo Sánchez Baena, y el resto de autoridades locales. También se encontraban presentes y saludaron al señor Fontana el párroco, don Salvador Prados Ibáñez; los Padres Leal Palacios y Murillo; el religioso agustino Padre Carmelo de la Cruz y los párrocos de Íllora, don José María Osuna, de Pinos Puente, don Cristóbal López Toro y de Peligros, don Nicolás Gómez Espigares; así como los alcaldes de Gabia Grande, don Claudio Torres; Pinos Puente, don Alberto Sánchez; Purchil, don Pedro García; Armilla, don Eugenio Vedia; Jun, don Francisco Rodríguez; Maracena, don Manuel López; Otura, don Isidro Ros; Belicena, don Rafael Rovira; Peligros, don Francisco Barrera; Alhendín, don Rafael Fernández; Chauchina, don Antonio Calvo; Gabia Chica, don Antonio Torres; Fuente Vaqueros, don Antonio Ávila y Albolote, don Antonio Montes.

Poco antes de las ocho hicieron su entrada en el pueblo los Excmos. y Rvdmos señores Arzobispo y Obispo auxiliar, que fueron anunciados por el repique de las campanas y salvas de cohetes.

El gobernador y las demás autoridades tras cumplimentar a los Prelados se dirigieron a la tribuna alzada a la derecha del monumento en honor del Sagrado Corazón de Jesús. El señor Arzobispo bendijo la obra con arreglo a la liturgia.

Después, el alcalde, señor Ruiz Cabello, tomo la palabra y leyó el acto de consagración, una oración sencilla y fervorosa, que la multitud escuchó arrodillada. Terminada la lectura, el Arzobispo habló brevemente solicitando la bendición divina para los campos y los hombres de Atarfe.

De esta manera terminaban los actos en honor del Sagrado Corazón de Jesús, que recogió el periódico granadino Ideal en diversos artículos publicados en los sucesivos días.

La fotografía se corresponde con un momento de los actos celebrados aquellos días.

En el especial de las fiestas de IDEAL del año 2007, los hermanos Pino Ortega nos ofrecieron un artículo que ahonda en la historia local, titulado “Atarfe, por el Sagrado Corazón de Jesús”. Comienza así:

«A las ocho de la tarde, en el Paseo de la Ermita de Santa Ana, donde se ha erigido, tendrá lugar el acto de descubrir y bendecir la Imagen y Monumento al SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS y la consagración de este vecindario a su divina protección, con asistencia de las primeras Autoridades Eclesiásticas, Civiles y Militares de Granada y de esta población, especialmente invitadas para tan solemne ceremonia, […]»

Así reza en el programa de los actos a celebrar en Atarfe con motivo de la inauguración del Monumento e Imagen erigidos por suscripción popular al Sagrado Corazón de Jesús, para los días 1 al 4 de junio de 1944.

La idea de levantar un monumento al Sagrado Corazón de Jesús surge de un anónimo que hizo suyo todo el pueblo. Se formó en seguida una comisión rectora a favor del monumento, presidida por el párroco, don Salvador Prados, y don Enrique Ruiz-Cabello Osuna, que preside el Ayuntamiento.

Los vocales han sido: don Antonio Sánchez Jiménez, don Eduardo Sánchez Baena, don Enrique Palacios, don Francisco Osuna Sánchez, don José Jiménez Osuna, don José Jiménez Ruiz- Cabello y don Manuel Jiménez Sánchez.

El 18 de julio de 1943 se colocó la primera piedra del monumento, coincidiendo con la primera misa del Padre Manuel Ramírez Osuna.

La Comisión formada al efecto envió escrito al Ayuntamiento, suscrito por varios vecinos de esta población en el que solicitaban que se les concediera el permiso necesario para construir e instalar un Monumento en honor del Sagrado Corazón de Jesús, en la explanada de la Ermita de Santa Ana. Este escrito fue favorablemente informado por la Comisión Municipal Permanente, de Policía Urbana, en el que se determinaba que no existía razón alguna que impidiera la concesión; indicando, además, que no procedía reclamar ninguna indemnización por el terreno público que habría de ocuparse.

De esta forma la Comisión Gestora del Municipio acuerda por unanimidad, el día 20 de febrero de 1943:

1º Conceder amplio permiso a la Comisión de vecinos suscriptores del escrito que nos ocupa, representada por el firmante D. José Jiménez Osuna, para que, de conformidad y a los fines mencionados en aquel puedan ejecutar todas las obras necesarias para la erección del Monumento proyectado en honor al Sagrado Corazón de Jesús en el sitio conocido por «Explanada de la Ermita de Santa Ana» utilizando al efecto el terreno público de esta que se considere necesario para toda la obra aneja al mismo:

2º Que esta concesión se considere hecha a perpetuidad y con relevación total de ninguna indemnización a favor del municipio, dado el carácter religioso y ornamental de la obra:

3º Que se notifique este acuerdo a la Comisión solicitante en la persona de uno de ellos D. José Jiménez Osuna, a los efectos que considere precisos para la ejecución de las obras proyectadas.

Este acuerdo fue ratificado por la misma Comisión en una sesión celebrada el día 11 de marzo de 1943.

El monumento fue ideado por el arquitecto don Juan Hofer Manzuco, para el cual utilizó sillares de Sierra Elvira trabajados bajo la dirección del marmolista don Antonio López.

Con letras bronceadas se gravó en la cara delantera el anagrama del nombre de Jesús, el alfa y el omega. En las cuatro caras del pedestal se pusieron sendas inscripciones bíblicas. «Yo soy el Señor», se lee en la cara de delante. Y luego de derecha a izquierda, dando la vuelta: «Yo soy el Camino», «Yo soy la Verdad», «Yo soy la Vida».

La imagen, que mide dos metros y medio de altura, es obra del joven artista granadino don Antonio Cano Correa –autor de la estatua de Alonso Cano situada en la plaza de su mismo nombre, junto a la Catedral de Granada –. Ésta, está colocada en una columna que mide cinco metros, con lo que parece de tamaño natural al que la contempla desde abajo

Inaugurado el 6 de junio de 1944, el monumento al Sagrado Corazón de Jesús preside la explanada del paseo de Santa Ana. Como ya hemos comentado en Gacetillas anteriores, la idea de levantar un monumento al Sagrado Corazón de Jesús surge de un anónimo que hizo suyo todo el pueblo. Se formó en seguida una comisión rectora a favor del monumento, presidida por el párroco, don Salvador Prados, y el alcalde don Enrique Ruiz-Cabello Osuna. La imagen, que mide dos metros y medio de altura, es obra de Antonio Cano Correa.

La nitidez del horizonte que se contempla al fondo de la imagen, los tejados a dos aguas de las casas de la derecha de la fotografía y la ausencia de pavimento en el suelo contrastan con la perspectiva que podemos contemplar n el día de hoy.

 

De la Ermita de Santa Ana en el libro “Historias de Atarfe” podemos leer: “se levanta junto al antiguo convento de la orden de San Pablo, de los llamados pasionistas por ser religiosos de la orden de la Cruz y Pasión del Señor, fundada por San Pablo de la Cruz para el servicio de los menesterosos. Se costeó con las limosnas de los vecinos de Atarfe.

En abril de 1650, figura en el libro de defunciones el entierro de fray Alonso Moreno, prueba l año 1960.de la persistencia de los ermitaños en el pueblo.

En la fotografía, estado del paseo de Santa Ana en 1960. La línea del tranvía y una escalinata separa los dos niveles de la calle.

Magnífica perspectiva del paseo de Santa Ana datada en la década de los setenta del siglo pasado. Con un firme irregular, es muy probable que no esté asfaltado aún, es notoria una leve inclinación desde los escalones al centro de la calle. Es perceptible el crecimiento de las ramas en los olmos que jalonan todo el perímetro de la plaza. Dos personas avanzan lentamente, desde la calle Barquillo hacia adelante. Otro individuo cubierto con sombrero se protege del sol, a la sombra de uno de estos árboles. Algún que otro hierbajo crece en la puerta de entrada a la cancela que rodea la estatua al Corazón de Jesús.

La fotografía que ilustra la Gacetilla de hoy se realizó el 26 de noviembre de 1967 con motivo de los actos programados para la celebración del día de la provincia. Entre los mismos se programó una solemne función religiosa, en honor de Nuestra Excelsa Patrona Santa Ana, ante la puerta de su santuario, oficiando el acto religioso el reverendo párroco, D. Francisco Puertas López.

La imagen forma parte del coleccionable de IDEAL, Atarfe memoria gráfica de una ciudad, y en ella podemos ver como Santa Ana fue colocada delante del monumento al Corazón de Jesús, presidiendo la eucaristía.

La fotografía está fechada en 1971 y en ella podemos diferenciar tres niveles: la carretera, los raíles del añorado tranvía y el paseo propiamente dicho. Un seto verde separa la línea férrea de la calzada habilitada para los coches, notándose una gran amplitud en ambas vías. La baranda metálica con sus características aros para “enganchar” las macetas de geranios era otra seña de identidad de aquel lugar; y las escaleras para conectar ambos espacios. Al fondo, el monumento al Corazón de Jesús y la esbelta torre de la ermita. Un camión aparece estacionado en el centro del paseo, mientras una pareja avanza con cuidado para evitar resbalar y caer al firme.

Es cierto que estas fotografías nos llenan de nostalgia y nos retrotraen a otras épocas en las que supuestamente éramos más felices o teníamos otras preocupaciones. Pero hay que mirar al futuro. Toda esta información que día a día escribimos en nuestra Gacetilla tiene como fin, aportar conocimiento y divulgar nuestra historia para establecer un horizonte de optimismo e ilusión. Tenemos las bases para ello, por eso en estas fechas entrañables, haced un hueco en vuestros pensamientos para trazar un espacio común con posibilidades para todos.

 

 

Instantánea realizada en 1971 en donde podemos ver parte del Paseo de Santa Ana nevado.

Realizada desde la terraza de los pisos sitos en la esquina de esta vía con la calle Alhambra, por aquellos entonces recién construidos, la perspectiva nos permite contemplar el Corazón de Jesús y el inicio de la calle Barquillo, con sus jardines anexos totalmente cubiertos de nieve. Algunas huellas del paso de un vehículo son reconocibles así como algunas personas caminando son sumo cuidado.

En el horizonte reconocemos la subastación del tranvía (Terraplén) y el Molino de los Alfonsos; al fondo del todo, el Ventorrillo de Marino y el almacén regulador de aceites “Ricardo Rojas Solís, Marqués de Tablantes”.

Una bella fotografía para estos tiempos navideños, para como dicen los más viejos, segundo día de Pascua.

La fachada de la ermita, la placa que conmemoraba la restauración del edificio tras los terremotos de abril de 1956 y como telón de fondo a la izquierda de la imagen, la arcada que cerraba la terraza del edificio, muy parecida a la existente en la calle Real. Hoy, una y otra han desaparecido.
Indudablemente esta fotografía evocará recuerdos diferentes a quien la contemple. Pero seguro que a todos nos traerá el afecto de pertenencia a un lugar, a una colectividad llamada Atarfe. Ese lugar, es dominio de todos y cada uno de los que lo hemos deambulado. Que permanezca viva esa necesidad.

En la fotografía, cortesía de Antonio Sánchez, el Paseo de Santa Ana en los años setenta. Esas macetas de geranios eran más que una seña de identidad.

Infinidad de detalles nos muestra esta instantánea del Paseo Santa Ana fechada en la década de los setenta del siglo pasado. Es llamativo en primer término la ausencia de asfalto en toda la explanada, aunque si es perceptible una enorme cantidad de bidones de este producto bituminoso para proceder al pavimentado del paseo.

Aunque hoy por hoy es inconcebible una calle sin asfaltar, los miembros de mi generación y generaciones anteriores, fuimos testigos de la campaña de asfaltado y pavimentado de las calles de nuestro pueblo en estos años.
Si os fijáis bien, no están construidos ninguno de los bloques de pisos de la Avd. de la Estación y calle Real, ni siquiera los de la esquina de la calle del Cine ni los de la calle las Moreras, los más antiguos de la zona.

Ningún vehículo transita por la zona, cosa inimaginable en la actualidad. Tan solo vemos un Seat 127 estacionado en el Paseo y se divisa en la lejanía un Citroen Dyane 6.

Otra fotografía del ayer del Paseo de Santa Ana en donde en el todo de la imagen predomina la hojarasca de los olmos que jalonaban ambos laterales de la calle. La magnitud que alcanzaban algunos de ellos contrasta con la altura del monumento al Corazón de Jesús. La presencia de un vehículo rompe la belleza del lugar.

Si me preguntan de qué color prefiero la fachada de la ermita, no sé responder si color blanco o color albero. ¿Cuál preferís?

Imagen retrospectiva del atarfeño Paseo de Santa Ana. Creo que el aspecto que luce en la actualidad es bastante más bonito que el que podemos contemplar en la fotografía (años ochenta del siglo pasado).

Ofrecemos hoy otra perspectiva del paseo Santa Ana y la Avd. de la Estación, observando en primer término los jardines existentes en aquella época (década de los setenta del siglo pasado), localizados junto a las vías del tranvía. La frondosidad de la imagen, con adelfas de varios colores, olmos, cipreses y rosales, perceptibles entre otras especies vegetales, contrasta fuertemente con la insulsa y fría pared blanca, eso sí aderezada con burlescas pintadas, que contemplamos en la actualidad.

Soy de la opinión que la uniformidad cromática del edificio de la ermita de nuestra patrona en la actualidad, es bastante más estético que la que muestra este cliché.

A veces me pregunto y llego a la conclusión que muchas obras se acometen, solamente por imposición o para satisfacer el ego del alarife, que proyecta y traza volúmenes y formas sin tener en cuenta las necesidades y gustos de los vecinos del lugar.

Lo único que en mi opinión, se ve en la imagen y falta ahora, son la fila de olmos que a ambos lados del paseo, adornaban y daban sombra. Los prefiero a estas especies exóticas que existen en la actualidad.

Vista de los jardines existentes al comienzo de la calle Barquillo, lateral del paseo de Santa Ana. El colorido de la vegetación de la fotografía, fechada en los años setenta del siglo pasado, contrasta fuertemente con la “tundra” de cemento y hormigón que disfrutamos en la actualidad. Una elegante escalinata comunicaba este espacio con la avenida de la Estación.
Nótese, en el lado superior derecho, las obras de los pisos de la calle Real, esquina calle del Cine.

Curiosidades elvirenses.

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