Los expertos avisan: los jóvenes de hoy oirán a los 50 como si tuvieran 80
Ruidos cotidianos como el tráfico intenso o el claxon de un autobús ponen en riesgo nuestra salud auditiva
Estamos rodeados de un ruido excesivamente alto que pone gravemente en riesgo nuestra salud auditiva. Ruidos cotidianos como los autobuses, una zona de obras, o sobre todo, los auriculares muy altos en los jóvenes afectan a nuestro oído.
Los datos son alarmantes, según los expertos, los jóvenes de hoy cuando cumplan los 50 años, tendrán la audición de un anciano de 80. Los 55 decibelios es el límite marcado por la Organización Mundial de la Salud como máximo volumen saludable.
Los oídos son la ventana hacia una vida llena de sonidos y sensaciones. Por este motivo, son muy importantes los cuidados y la limpieza del oído desde edades tempranas, siguiendo las revisiones recomendadas y evitando someterlos a ruidos intensos, para evitar problemas auditivos e infección de oídos. Aquí te mostramos algunas recomendaciones:
- Reduce el número de aparatos ruidosos que funcionan al mismo tiempo.
- Si es posible, baja el volumen de los aparatos eléctricos sonoros.
- Baja el volumen de la televisión, la radio, el equipo de sonido y el reproductor MP3.
- No abuses del uso de reproductores de música durante más de una hora al día y con un volumen por debajo del 60% del máximo posible.
- Compra productos más silenciosos. Compara la potencia acústica: cuanto menor sea mejor.
- No te expongas a ruidos fuertes o hagas uso de audífonos a todo volumen.
- Vete de un lugar cuando el sonido sea muy alto.
- Si trabajas con equipos ruidosos, ponte protección auditiva.
- Ten especial cuidado con tus oídos cuando se presenten catarros, gripes o infecciones, que a la larga pueden causar pérdida auditiva.
- Recuerda que las infecciones están consideradas como la segunda causa de pérdida de la audición.
- Sécate los oídos después de cada baño, para evitar la humedad en el conducto auditivo y a su vez, la posible infección por hongos.
- Cuando te bañes o si practicas natación, usa tapones a medida para protegerte de la humedad en el conducto auditivo externo. A poder ser, de material hipoalergénico, flexible y ligero. Con ellos puedes evitar problemas en el oído.
- No introduzcas objetos en el oído, ni siquiera los bastoncillos de algodón, ya que puedes dañar la membrana, el interior o provocar tapones con el cerumen acumulado.
- Si se detectan retrasos tanto en el aprendizaje como en el habla de los niños deben realizarse estudios para identificar posibles problemas auditivos.
- Visita a tu médico especialista cuando notes alguna molestia en tu/s oído/s y evita la automedicación.
- Realiza tests auditivos preventivos, sobre todo si tienes antecedentes de enfermedades degenerativas. Es importante conservar lo que se tiene para que el problema no vaya a más.
- Es recomendable realizar una revisión auditiva si tienes 50 años o más, a esta edad se puede empezar a presentar la pérdida auditiva por vejez.