Cómo afecta el cambio de tiempo a tu ánimo y cómo hacerle frente
El cambio en las temperaturas y la llegada de la lluvia puede disminuir nuestro estado de ánimo y energía
Decimos adiós al verano y septiembre trae nuevos cambios en el tiempo: despedimos el calor intenso y damos la bienvenida a las habituales bajadas de temperatura, las lluvias y las tormentas propias de este mes. Signos indiscutibles de la próxima llegada del otoño.
El otoño puede traer más que hermosos colores, temperaturas más frescas y días más cortos: pero este cambio en el tiempo puede llevar también a una disminución en el estado de ánimo y la energía. Dependerá, en cualquier caso, de lo meteorosensible que seas
Las rutinas toman el control y hay menos tiempo para las actividades al aire libre y el tiempo de inactividad. Los cálidos y soleados días de verano son reemplazados por los atascos de tráfico que provocan estrés, las apretadas agendas y la vuelta al día a día. La mera idea del próximo tiempo invernal da escalofríos en otoño.
Afortunadamente, la mayoría de la gente no alcanzará un nivel “diagnosticable” de trastorno afectivo estacional (TAE), un trastorno del estado de ánimo relacionado con el cambio de las estaciones, pero hay cambios definitivos que ocurren en otoño que pueden afectar nuestra energía, estado de ánimo, metabolismo y sueño.
En primer lugar, no todo es “malo” en otoño. Nuestra testosterona aumenta, por lo tanto, también lo hace nuestro deseo sexual, y la fertilidad parece ser mejor en los meses que van de octubre a diciembre. Nuestra memoria y nuestro enfoque también suelen mejorar en este periodo.
Menos serotonina y más melatonina
Lo que sí sufren son nuestros niveles de serotonina, la hormona de la felicidad, que se produce naturalmente por la exposición al sol. Durante los meses más fríos, ésta comienzan a disminuir y la melatonina, la hormona que controla nuestro sueño, aumenta, lo que puede llevar a dormir más y a disminuir el estado de ánimo.
Y aunque dormimos más en octubre que en otros meses, la calidad y la profundidad del sueño también sufren, por lo que puedes terminar sintiéndote “atontado” durante el día.
Durante los meses más fríos generamos más melatonina, la hormona que controla nuestro sueño: dormimos más y estamos más decaídos
Ten en cuenta que tu metabolismo también puede verse afectado. La hormona tiroidea cae naturalmente en los días fríos y más oscuros del otoño y el invierno. Dado que la hormona tiroidea controla la energía y el metabolismo de cada célula de nuestro cuerpo, es necesario un refuerzo de la tiroides adicional. Mejora durante este periodo tu metabolismo con un buen desayuno.
Pero hay más: los estudios relacionan directamente la caída de las temperaturas y el aumento de su intensidad con el dolor articular. Especialmente significativos son también los dolores de cabeza y migrañas relacionados con los cambios de presión.
Alergia en otoño
Finalmente, hay que prepararse para que los síntomas de la alergia de otoño aparezcan. A medida que cambian las estaciones, las plantas de ambrosía arrojan miles de millones de granos de polen hasta noviembre o hasta la primera helada del año. La fiebre del heno puede afectar el estado de ánimo.
Consejos para mejorar tu estado de ánimo
1 – Sal fuera. Los estudios demuestran que solo unos pocos minutos caminando con aire fresco pueden levantar el ánimo y el estado de ánimo. Un estudio publicado en el Journal of Consumer Psychology reveló que las personas se sentían más positivas con la luz al aire libre.
2 – Organiza algunas actividades relacionadas con el otoño, como recoger setas o castañas. Incluso cuando hace frío y llueve, todavía tendrás cierta exposición a los rayos UV, que pueden ayudarte a mejorar tu estado de ánimo y regular el ritmo de tu cuerpo.
3 – Haz deporte en otoño. Una investigación del British Journal of Sports Medicine revela que solo 20 minutos de actividad física pueden mejorar el estado de ánimo.
4 – Deshazte del desorden. El caos visual puede parecer inofensivo, pero el desorden, la desorganización, son estresantes y desaniman a la gente. Los estudios demuestran que cuando las personas se encuentran en entornos estéticamente agradables, organizados y despejados, se sienten más relajados y contentos.
5 – Sé positivo. Céntrate en lo que está yendo bien. Ponte propósitos alcanzables y valora lo que tienes, explora tu positividad y fomenta el optimismo.