22 noviembre 2024

España, el quinto mejor lugar para vivir del mundo, según un nuevo estudio España, el quinto mejor lugar para vivir del mundo, según un nuevo estudio

Propuesto por un grupo de investigadores, el Indicador de la Vida Humana se basa en la esperanza de vida y coloca a nuestro país entre los más desarrollados del planeta.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) creó en 1990 el Índice de Desarrollo Humano (IDH), que arroja cada año un diagnóstico del estado del mundo, país por país, más allá de los meros datos económicos. Para elaborar el ranking se tienen en cuenta, además de la renta per cápita, parámetros relacionados con la salud o la educación.

El último IDH se publicó en septiembre de 2018, y en él España obtenía una puntuación de 0,891 sobre un máximo de 1, lo que nos colocaba en un 26º puesto mundial, destacable aunque lejos de la élite. El país donde se alcanzan los mayores niveles de desarrollo humano sería, a día de hoy, Noruega, –0,953 puntos–, seguido de Suiza, Australia, Irlanda y Alemania.

Normalmente, los medios de comunicación dan amplia cobertura y credibilidad a este medidor de la ONU, pero un estudio publicado en la revista especializada Population and Development Review le saca defectos y propone una alternativa más simplificada y, supuestamente, veraz: el Indicador de la Vida Humana (HLI, por sus siglas en inglés).

Solo puntúa la longevidad

El HLI se confecciona teniendo en cuenta solo la esperanza de vida al nacer, aunque los investigadores después ajustan el índice a la complejidad que oculta este sencillo parámetro demográfico. Es decir, puntúan peor los países donde hay un apreciable número de personas longevas –con más recursos económicos– pero también gente que muere joven –generalmente, pobres– que aquellos con una misma esperanza de vida media donde está más equilibrada la edad de fallecimiento. Así, el criterio de la igualdad o desigualdad social quedaría reflejado.

Como indica Simone Ghislandi, profesor asociado del Departamento de Ciencias Sociales y Políticas de la Universidad de Bocconi (Milán) y uno de los autores del trabajo, han escogido la esperanza de vida porque es el parámetro más fiable que se maneja para elaborar el IDH de la ONU.

Además, en opinión de Ghislandi y sus colegas, la vida no vale lo mismo según el país donde se mida, ya que el IDH admite distintas combinaciones de longevidad media y renta per cápita para calcular las puntuaciones.

Entonces, ¿cómo quedaría la lista de desarrollo humano si aplicamos el HLI en vez del tradicional IDH? Pues el panorama es radicalmente distinto. Uno de los cambios más llamativos es precisamente el que sufre España, que pasa del citado puesto 26º que le adjudica el IDH al 5º en el HLI. Y a Alemania le ocurre lo contrario, que cae a la posición 25ª, cuando era la quinta nación más desarrollada del mundo de acuerdo con la ONU. Otros saltos espectaculares son los de Japón (del 19º al 2º) e Italia (del 28º al 6º).

Este sería el ranking con las primeras 10 posiciones según el HLI (entre paréntesis, el país que ocupa ese puesto en el IDH):

1. Hong Kong (Noruega).

2. Japón (Suiza).

3. Islandia (Australia).

4. Singapur (Irlanda).

5. España (Alemania).

6. Italia (Islandia).

7. Suiza (Hong Kong).

8. Suecia (Suecia).

9. Noruega (Singapur).

10. Australia (Holanda).

Más información: Simone Ghislandi, Warren Sanderson y Sergei Scherbov. “A Simple Measure of Human Development: The Human Life Indicator”. Population and Development Review. 6 de noviembre de 2018. DOI:10.1111/padr.12205.

 

 

 

Pablo Colado