Imbroda, el consejero que recorta en la educación pública, es dueño de una creciente cadena de institutos privados
Mientras asistimos a un caótico inicio de curso, con cierre de unidades escolares públicas y con toda la comunidad educativa en contra, los centros privados propiedad del consejero de Ciudadanos siguen aumentando
En Andalucía se está viviendo una gran paradoja. Javier Imbroda, consejero de Educación del gobierno andaluz formado por Partido Popular y Ciudadanos es el propietario de una empresa privada con amplios intereses en el sector educativo: Instituto MEDAC. Se trata de una creciente cadena de centros educativos de ámbito privado especializados en Formación Profesional, y que, de forma paralela a un caótico y polémico inicio de curso en los centros públicos de la comunidad, dependientes de esa misma consejería de Imbroda, anuncia la apertura de nada menos que cuatro nuevos centros en puntos como Sevilla, Jerez de la Frontera o Madrid. En total, son ya los 13 centros de esta empresa vinculada al político de Ciudadanos, una docena de ellos en la comunidad andaluza.
Instituto MEDAC se presenta como un proyecto exitoso “fruto del duro e interminable trabajo de cada día”, según se lee en su página web. Fue fundado en 2010 por Javier Imbroda, que figura en esta misma página web como “expresidente”. El consejero utiliza fórmulas para no figurar en primera línea de una empresa de centros educativos de carácter privado, con el consiguiente conflicto de intereses que podría acarrear. Sin embargo, su papel como principal exponente de esta iniciativa privada está claro. En los primeros años de trayectoria de MEDAC, era el propio Imbroda quién recorría las provincias andaluzas exhibiendo las características de su proyecto empresarial, en el que actualmente figura como consejero delegado Francisco Ávila, amigo personal de Imbroda.
Sin embargo, el consejero del partido de Albert Rivera y Juan Marín sí continúa como inversor de esta empresa del sector de la educación que aspira a seguir creciendo en Andalucía gracias a los beneficios que el nuevo gobierno de derechas, y el propio consejero Imbroda, ya ofrece a los centros educativos privados. Coincide además su nombramiento como consejero de Educación y Deporte del Gobierno andaluz, el 21 de enero de 2019, con el cese del cargo que ostentaba en Instituto MEDAC, registrado el 31 de enero. No obstante, su participación en las decisiones fundamentales, socio fundador y persona de referencia en esta empresa privada sigue siendo alta.
Este vínculo con una empresa con fuertes intereses en el mismo sector del que es consejero, es un hecho insólito en una sociedad en la que la ciudadanía demanda paulatinamente dosis más altas de transparencia y buen gobierno. Toda una puerta giratoria a la inversa que puede llevar a favorecer decisiones, que ya se están tomando, en beneficio de la educación privada y el desarrollo de centros de FP privados en Andalucía. El propio consejero Imbroda ya tuvo un curioso caso de poca transparencia en los primeros compases de su trayectoria política en el Parlamento de Andalucía.
Al inicio de la presente legislatura, cuando debía de realizarse el registro de la declaración de bienes y retribuciones de los parlamentarios electos, tuvo lugar un curioso fallo en los de Javier Imbroda. El hoy consejero de Educación aparecía con 8.600 fondos propios en entidades bancarias en la declaración, cifra muy inferior a la que había declarado legalmente en 2018. Tras ser preguntando por cómo podía fluctuar tanto su declaración, la respuesta oficial fue que ocurrió un “error” en la transcripción de los datos, y que la cifra real era de 8’6 millones de euros. Un consejero millonario que además puede serlo aún más si su empresa de educación privada sigue creciendo gracias al impulso de un gobierno andaluz de derechas que recorta en la pública para favorecer a la privada.
FOTO: Imbroda, el consejero que recorta en la educación pública, es dueño de una creciente cadena de institutos