22 noviembre 2024

El Mirador de San Nicolás se sitúa en el Albaicín, en la parte más alta de la Alcazaba Qadima. Este enclave tenía como función principal, en la época Zirí, como lugar de reunión y plaza de armas. Su configuración inicial era una plaza rodeada por casas y palacetes árabes, donde se dice que tuvieron lugar secretas negociaciones que terminaron en la rendición de Boabdil y la toma de Granada por los Reyes Católicos en 1492.

Con el paso del tiempo se fue despejando este espacio hasta mediados del siglo XIX, cuando tomó las dimensiones que tiene actualmente.

Hoy el Mirador de San Nicolás es una plaza de forma cuadrada, con árboles alrededor, bancos de piedra y el típico empedrado granadino.

Qué hay alrededor a destacar.

Pocas cosas se pueden recomendar que no se hayan mencionado ya sobre este punto único de Granada.

Su visita es obligatoria si uno quiere grabarse en la retina una de las imágenes más icónicas y reconocibles del mundo el entero: la Alhambra con la imponente Sierra Nevada al fondo y si ya la montaña se encuentra bañada por el mando blanco del invierno y ambas son tintadas por la luz azafranada del atardecer, las vistas no pueden ser más espectaculares.

De aquí tuvo que salir el famoso poema de Francisco de Icaza:

Dale limosna, mujer,

que no hay en la vida nada

como la pena de ser

ciego en Granada.

Escalar por las estrechas y empinadas calles del Albayzín, respirando olores como el jazmín y la granada, el naranjo y el limonero, disfrutando de la sombra de las callejuelas enmarcadas entre cipreses y buganvillas e intentando vislumbrar el interior de los cármenes, tiene su recompensa con la llegada a la cumbre, es decir, al mirador de San Nicolás.

Además de las vistas de la Alhambra compuestas por la Alcazaba con la recia Torre de la Vela como protectora, están los Palacios Nazaríes, custodiados por la Torre de Comares, el colosal Palacio de Carlos V y la Iglesia de Santa María de la Alhambra; los jardines del Partal y el Peinador de la Reina y del Generalife, desde aquí, también se divisan la ciudad de Granada y su Vega.

Mirador de San Nicolás Granada
Vistas de la Alhambra desde el mirador.
Mirador de San Nicolás Granada

La Noche…

Por las noches, igualmente, uno se puede dejar atrapar por el embrujo la majestuosa Alhambra iluminada con la luna como compañera.

Sin lugar a dudas, uno de los mayores placeres que uno puede vivir en Granada, es disfrutar de estas vistas, con una refrescante cerveza en la mano durante las calurosas tardes de verano en cualquier de las terrazas que se encuentran bordeando la plaza.

Para aquellos que prefieran contemplar la majestuosa ciudad palatina con algo más de tranquilidad y sin tanto ajetreo de turistas, artesanos y flamenco, pueden acercarse al jardín de la mezquita próxima a la explanada.

Si su visita coincide con el último fin de semana de septiembre, no dejen de subir para disfrutar de las fiestas del barrio que tienen lugar este singular espacio con la Alhambra de fondo con la música de grupos locales en directo como acompañamiento.

Restaurante Estrella de San Nicolás.
Restaurante Estrella de San Nicolás. Anteriormente, fue casa del célebre cantaor granadino de flamenco Enrique Morente.

El mirador recibe su nombre por la iglesia que se sitúa justo a sus espaldas y que, anteriormente, había sido mezquita, hecho que se repite con muchas iglesias de la antigua capital nazarí.

La Iglesia de San Nicolás

La iglesia, de arte mudéjar y consagrada en el año 1.525, consta de una única nave central y cinco capillas laterales.

El templo cuenta con una torre de planta cuadrada abierta al público, a la que se puede acceder abonando una pequeña aportación con el fin de acometer las obras de rehabilitación de la edificación, que adolece de diferentes desperfectos.

Fachada de la Iglesia de San Nicolás, actualmente en proceso de restauración.
Fachada de la Iglesia de San Nicolás, actualmente en proceso de restauración.
Interior de la Iglesia de San Nicolás en obras.
Interior de la Iglesia de San Nicolás en obras.

Justo al lado, se encuentra el Aljibe de San Nicolás, perteneciente a la antigua mezquita que se ubicaba aquí.

Los aljibes son antiguos depósitos de agua construidos durante el reinado árabe y hay varios ejemplos de ellos repartidos por toda la ciudad, aunque el más grande es el Aljibe del Rey, también situado en el barrio del Albayzín y que puede ser visitado en ciertas fechas señaladas del año.

Aljibe del Mirador de San Nicolás.
Aljibe del Mirador de San Nicolás.

Finalizada la visita al representativo mirador, podrán adentrarse en la parte alta del Albayzín, cruzando por la Puerta de las Pesas, para llegar a Plaza Larga, centro neurálgico de este barrio morisco.ENTRAR AQUÍ PARA CONOCER EL MIRADOR Y EL ALBAICÍN

Bajar a la capital…

Si lo que deciden es comenzar el descenso hacia el centro de la ciudad, lo mejor es enfilar el callejón de las Tomasas hacia la derecha, a cuyos flancos se encuentran otros lugares de interés como el Carmen del pintor Max Moreau, que hoy está abierto como casa-museo.

Aquí, además de ver cómo es una casa típica granadina, podrán contemplar alguna de sus obras y las vistas de la Alhambra con las que se inspiraba el pintor francés.

Continuando por esta transitada calle se cruzarán con el convento de Santa Isabel la Real, del que sólo se puede visitar su plazoleta y la fachada.

Un poco adelante, desembocarán en la plaza de San Miguel Bajo y saliendo de ella podrán disfrutar de otra magnífica panorámica de la ciudad.

Desde aquí, prosigan el descenso por las empedradas y sinuosas calles hasta llegar al último mirador antes de aterrizar en las teterías del Albayzín, el Ojo de Granada, donde se puede observar la Catedral como punto focal del paisaje urbano.

Mirador de San Nicolás Granada

Simplemente, acérquense y déjense impregnar por la magia que envuelve el lugar, la música, los artesanos, los turistas, los lugareños y disfruten con el mejor atardecer del mundo.

https://www.granadaporelmundo.com/mirador-de-san-nicolas/