La ‘ley Celaá’ apuesta por la educación personalizada y la supresión de los itinerarios

El Consejo de Ministros ha aprobado el proyecto de Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE) que ahora iniciará su trámite parlamentario. La ministra de Educación Isabel Celaá ha mantenido el mismo texto que el Gobierno ya aprobó la pasada legislatura. De esta forma se pretende acelerar su tramitación parlamentaria sin que tenga que volver a pasar por los órganos consultivos como el Consejo Escolar. Será en el Congreso y el Senado, con la presentación de enmiendas de los diversos partidos, cuando se pueda consensuar alguna variación.

La ministra Celaá presenta la ley «basada en la equidad»

«Esta ley busca la calidad del sistema para todos. Se fundamenta en la equidad, nadie puede quedar atrás. El destinatario de esta ley es el alumnado».

«Buscamos que no haya segregación en el alumnado, se acaba con los itinerarios segregados».

«La etapa de cero a tres es fundamental. Se evitará los que no sean educativos o no tengan calidad».

«La etapa Primaria se desarrollará través de tres ciclos de dos años. El no hacerlo así ha supuesto un aumento de repeticiones muy indeseable que provoca abandono escolar».

«La Educación Secundaria actual operaba hacia una canalización de talentos y a partir de 13 años se decidía si iba a la Formación Profesional o Bachillerato y dos titulaciones. Ahora donde había barreras ponemos grandes autopistas. Al esfuerzo del alumno hay que incorporar el esfuerzo del sistema». 

«En el plazo de un año el Gobierno presentará un modelo para la carrera docente. Necesitamos que reúna las características más idónea. Entrará en la escuela acompañado de un docente y permanecerá un año de prácticas».

«Tenemos que avanzar en la inclusión y la participación con los consejos escolares que vuelvan a ser activos».

«La enseñanza personalizada es el corazón de esta ley para desarrollar los talentos. Se puede hacer a través de las distintas pedagogías y del currículum». 

«La ley va a un sistema menos memorístico y afecta a la distribución de los espacios».

«La ley respeta la Constitución y las sentencias de Tribunal Constitucional en materia lingüística y explica que que al final de la enseñanza obligatoria tendrá capacidad de uso de castellano y de la lengua cooficial si hubiera».

La escuela concertada, en la ‘ley Celaá’

«El tratamiento de religión en el texto está desde febrero de 2019, desde antes del Gobierno de coalición. La religión será voluntaria y no tendrá asignatura espejo. La voluntad de unos no puede suponer obligación a otros». 

«El proyecto de ley afirma que preferentemente se concertarán aquellos centros que no separen a los alumnos por razón de género«.Se refiere Celaá a los criterios para destinar fondos públicos a la escuela concertada. 

«Hay que avanzar en la eliminación de la segregación por ninguna causa. Vamos a hacer avanzar la educación de calidad y los consensos sociales. Esta ley busca la justicia o la equidad y no puede ser confundido con una resta de libertad, al contrario, es libertad para todos». 

La educación como «ascensor social»

La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha subrayado, por su parte, que el Ejecutivo defiende «una educación de calidad» para garantizar «la equidad y la inclusión», que «nadie se quede atrás» y «vuelva a funcionar» la educación como «ascensor social».

Montero ha criticado «el veto a la educación integral de niños y niñas» que se defiende desde algunos partidos ya que cree que «no vale la ambigüedad calculada en el discurso político».

Los cambios de la nueva ley

La nueva ley acaba con los los aspectos más contestados y más polémicos de la LOMCE:

• Las reválidas desaparecen. Habrá pruebas de diagnóstico al finalizar Primaria y la ESO.
• Los itinerarios en secundaria quedan suprimidos.
• El concepto de demanda social para abrir centros concertados desaparece de la ley.
• Religión volverá a no ser computable en la nota media en el acceso a la Universidad y quienes no la elijan no tendrán que cursar una asignatura alternativa. Tampoco será computable para becas.

Entre las novedades:

• Habrá una nueva asignatura de valores obligatoria, Educación en valores cívicos y éticos. 
  
• Los alumnos que repitan tendrán que tener un plan personalizado.
• Se pretende reducir la segregación socioeconómica evitando la concentración de alumnos pobres o con dificultades en determinados centros.
• Se priorizará a los centros que apliquen el principio de coeducación y no separen al alumnado por género u orientación sexual.