EL IMPERATIVO DE CAMBIAR LAS FORMAS DE VIVIR
El ninguneo al Gobierno Español por parte de quienes se resisten a cambiar las políticas, dado que esta pandemia nos ha llevado a tal límite, y no se puede seguir mirando hacia otro lado que no sea la vida humana, y la preservación de la Madre Tierra, pues con ella nos va la vida.
El Gobierno Andaluz se remueve en el sillón por las medidas implementadas por la Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, por algo tan básico como que no se esclavicen a las obreras y obreros del campo, que por cierto según los informes, la patronal debido a la pandemia ha tenido dificultades para encontrar personal, ya que hasta este año la mano de obra de estos campos españoles era importada de Rumanía, Marruecos… ¿Cuántas veces hemos oído y visto parte de la ciudadanía aplaudir que se echen de este país a las personas extranjeras?.
No menos ninguneo y desprecio ha tenido ese mismo Gobierno Andaluz con las más de 242 ONG que han realizado sus proyectos una vez presentados en tiempo y forma, valorados, cuantificados y aprobados por el Instituto Andaluz de la Mujer en la Convocatoria de Subvenciones Competitivas 2019, este IAM no ha cumplido con lo publicado en el Boja, puesto que ha dejado fuera de esta convocatoria como he mencionado a 242 Organizaciones que habían realizado los proyectos para cumplir con las fechas de ejecución marcadas, cinco meses después, aún no ha reparado el daño moral y económico provocado al Tercer Sector, que es uno en los que más precariedad laboral existe y más se atienden y denuncian las injusticias sociales, los crímenes y otras violencias hacia las Mujeres, la pobreza y un largo etc. que da salud y progreso a toda la ciudadanía, si no denunciamos tal ninguneo y desprecio, en este caso, al trabajo de las ONG de Mujeres y otras, se convertirá en norma, será naturalizado el trabajo gratis en lo privado como deber y en lo público como voluntariado.
Especialmente lamento que no sembremos de denuncia alguna, las redes, hasta conseguir decir alto y claro, hemos llegado al límite de las injusticias y la barbarie, es imperativo cambiar las formas de vivir, de producir, de consumir, de viajar, de disfrutar del ocio… no reparando en la destrucción de bosques de fauna marina, abandonando en pro de los servicios privados, la externalización del trabajo público, la competitividad y las esclavizantes condiciones laborales, los cuidados de la infancia, personas mayores dependientes…. Abandonando lo que caracterizaría a la raza humana sin pudor alguno, ni pensando el sistema que heredarán nuestras nietas y nietos.
Rafaela Pastor Martínez. Presidenta de la Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Eurpeo de Mujeres