5 diciembre 2024

Aun siendo consciente de que cada país tiene su propia idiosincrasia, sus propias costumbres, tradiciones, condiciones geográficas e históricas y puntos de partida educativos distintos, compararé el sistema educativo estonio y el español.

Y la única razón por la que lo hago es la mejora de la Educación en España. En la revista XLSEMANAL del domingo 5 de diciembre aparece un artículo que arroja luz sobre el tema. Basado en él analizaré ambos sistemas educativos desde la óptica de las características que miden su calidad.

1ª.- Estabilidad y durabilidad

La primera gran diferencia que observamos es de naturaleza política. Existen leyes que, por su trascendencia, necesitarían el consenso de toda la sociedad, y pienso que las leyes educativas cumplen esa condición. La Educación en España es un problema, no un conflicto ideológico en el que cuando unos acceden al poder imponen su modelo educativo a los otros. Necesitamos como agua de mayo un Pacto Educativo. Ese problema lo tienen solucionado en Estonia, porque cuenta con una estrategia educativa hasta 2035 consensuada por la gran mayoría de los partidos políticos. ¿Cuándo llegaremos a ese consenso en España?

2ª.- Equidad

Un sistema educativo es equitativo cuando todos los ciudadanos tienen las mismas oportunidades sin que la procedencia socioeconómica influya en el acceso a los estudios. No lo es cuando se obtienen los mismos resultados, generalmente igualando por abajo. En Estonia, las comidas, los libros y el transporte son gratuitos y la educación es inclusiva. Los alumnos rezagados o con problemas de comportamiento son atendidos en grupos reducidos o con clases personalizadas. Las aulas cuentan con una ratio reducida, de menos de 18 alumnos y cuentan con una red nacional de centros de apoyo que proporciona ayuda adicional a los estudiantes con necesidades educativas especiales. De esa forma sí se puede atender a la diversidad. Con ratios de 25 alumnos en primaria y 30 en secundaria y sin centros de apoyo, díganme si ello es posible.

3ª.- El Profesorado

Los profesores estonios son bien seleccionados y tienen acceso en sus propios centros a una formación continua. Son respetados y valorados por toda la sociedad. Y cuentan con mucha libertad en cuanto a contenidos y metodología. ¿Igual que aquí?

4ª.- Tecnología

A pesar de contar con pocos recursos, los estonios son pioneros en la tecno-educación, la aplicación de la tecnología informática a la educación. Los niños aprenden a programar desde los 7 años, y cada centro escolar dispone de un equipo de profesionales, previamente formados, que se encarga, durante todo el curso escolar, de la formación del profesorado en metodología y uso de las nuevas tecnologías. El fracaso en nuestro país del proyecto Escuela 2.0 tiene que ver con esa formación. La utilización de los ordenadores en la escuela ha de venir acompañada del cambio metodológico apropiado. Y de las inversiones necesarias.

5ª.- Las Lenguas

El sistema educativo estonio concede gran importancia a las lenguas, comenzando por la suya propia, a la que priorizan y cuidan a lo largo de las diferentes etapas educativas. En secundaria muchos alumnos estudian más de tres lenguas extranjeras. Los profesores están muy preparados y formados para ello. Y los alumnos terminan su educación superior hablando con fluidez esas lenguas. Juzguen Uds. si ocurre lo mismo en nuestro país.

6ª.- La Descentralización

Las escuelas estonias tienen gran autonomía. El Ministerio orienta sobre unos objetivos y contenidos generales y los directores deciden por su cuenta los planes de estudio y los horarios del alumnado. El Estado evalúa los centros cada tres años mediante pruebas a los alumnos en la Red. Y sólo interviene en caso de problemas. Cuenta con un pequeño número de inspectores que se encargan de apoyar y respaldar a los centros educativos. No hay control. Tampoco burocracia. Los profesores españoles actuales pueden dar fe de si en su entorno educativo ocurre lo mismo.

7ª.- Excelencia

Quizás sea la única condición en la que flojea el sistema educativo estonio. Es de los países con menos alumnos con peores resultados, pero también, con menos con resultados excelentes. Y es que los alumnos de alta capacidad también necesitan atención. Necesitan doble ración, porque si no, se aburren en las clases.

8ª.- Tasa de Repetición

En Estonia, igual que lo era en España, se plantea la repetición en la enseñanza obligatoria con tres o más materias sin aprobar. En España además se contemplaba repetir con dos si eran Lengua y Matemáticas. Sin embargo, la tasa de repetición en Estonia es del 2,9%, mientras que en España se eleva al 28,7%, aproximadamente 10 veces más. Todo tiene que ver, como explicábamos en el punto de la equidad, con la atención a los alumnos con problemas de aprendizaje. No a su promoción sin tener las aptitudes necesarias para ello. Como, en muchas ocasiones, ocurre en nuestro entorno.

9ª.- Inversión educativa

Estonia, un país pobre, hace un gran esfuerzo económico para llegar a invertir en Educación el 6% de su P.I.B (Producto Interior Bruto). Los estonios saben de la importancia que tiene el gasto en Educación. En España en 2019 se invirtió el 4,26 % del P.I.B., y ya había aumentado mucho desde el año anterior.

CONCLUSIÓN

No es fruto del azar que este pequeño país europeo ocupe los primeros lugares en los informes Pisa, como tampoco lo es que el nuestro siempre esté por debajo de la media de los países de la Comunidad Europea. Todo tiene su causa.