Homenaje a ocho mujeres que tuvieron un papel esencial en la historia reciente de la provincia

Ana Ávila, Ángeles Mora, Elena Morán, Enriqueta Barranco, Inmaculada Fuentes, María Castellano, María José Sánchez Rubio y Remedios Murillo, distinguidas con todo merecimiento.

La Subdelegación del Gobierno ha acogido esta tarde el acto de entrega de reconocimientos a ocho mujeres que han tenido un papel esencial en la historia reciente de nuestra provincia en el marco del proyecto “Granadinas por la Libertad”.

López Calahorro ha manifestado que con este homenaje “se aborda por fin la necesaria reparación y justicia para tantas mujeres valiosas, pioneras en diferentes ámbitos, que han sido los pilares en los que se asienta la construcción en nuestra provincia de una sociedad democrática, una sociedad que tiene que seguir luchando cada día para alcanzar la igualdad real entre hombres y mujeres”

Este proyecto, que cumple su cuarta edición, “surge para  reivindicar el lugar de las referentes femeninas de la provincia que han sido sistemáticamente invisibilizadas y silenciadas” ha señalado López Calahorro, quien también ha manifestado que con este homenaje “se aborda por fin la necesaria reparación y justicia para tantas mujeres valiosas, pioneras en diferentes ámbitos, que han sido los pilares en los que se asienta la construcción en nuestra provincia de una sociedad democrática, una sociedad que tiene que seguir luchando cada día para alcanzar la igualdad real entre hombres y mujeres”.

En esta ocasión se ha rendido homenaje a:

Ana Ávila. Nacida en 1938 en Loja, es pionera en el sector empresarial granadino; junto a su esposo, Apolonio, fundó en 1963 la primera empresa de congelados de la provincia –Congelados Apolo- que, actualmente, mantiene a más de 150 familias. Así, hoy, desde aquella primera tienda de congelados en Granada, con esfuerzo y tesón lograron que su compañía facture actualmente cerca de cincuenta millones de euros y sea una de las empresas andaluzas más importantes del sector. Actualmente Ana Ávila, artista autodidacta, centra su vida en el museo que lleva su nombre (con nueve salas dedicadas a pintura, artesanía o belenes, entre otras disciplinas) y en el compromiso social con colectivos como Cruz Roja, la Asociación contra el Cáncer o de la de Donantes de Sangre, oenegés que ha presidido durante varios años.

Ángeles Mora Rute, Córdoba. 1952. Licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada, ciudad donde reside desde hace más de cuarenta años. Vinculada a La Otra Sentimentalidad, el movimiento literario que vino a revolucionar la poesía española en los inicios de los años ochenta, publica su primer poemario, Pensando que el camino iba derecho, en 1982. Se trata de una de las voces más importantes de la poesía española de las últimas décadas y la única poeta que ha ganado en Premio Nacional de Poesía y el Premio Nacional de la Crítica, en concreto con su obra Ficciones para una autobiografía (2016). Otras de sus publicaciones señeras son La guerra de los treinta años (1990, Premio Rafael Alberti) o Contradicciones, pájaros (2001, Premio Ciudad de Melilla). Con un rotundo compromiso feminista, presidió la Asociación ‘Mujer y Literatura: Verso libre’ y forma parte de la Academia de Buenas Letras de Granada.

 

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En las dos imágenes superiores, dos monentos del acto, en la de abajo, la actuación final de Esther Crisol.

Elena Morón. Las primeras taxistas granadinas empiezan mediados los años setenta. La pionera es Elena Morón Antequera (Cádiar, 1945), con la licencia 170. Para acudir a la escuela, caminaba siete kilómetros diarios y, terminadas las clases, debía ocuparse del cuidado de las cabras. Emigró a Alemania junto a su marido y allí permanecieron nueve años. Regresaron y compraron dos licencias de taxi: una para Elena y otra para su esposo. Empieza así su trabajo, conduciendo un Seat 124 alternado con un Seat 1500; pero, ante el machismo imperante en la época y para complementar ingresos, se dedicó también a la costura. Elena Morón es un ejemplo de sacrificio, capacidad y esfuerzo en un ámbito profesional que, aún hoy, continúa siendo mayoritariamente masculino.

Enriqueta Barranco. Nació en Pinos Puente en 1950. Ginecóloga del Hospital Clínico San Cecilio y docente de la Facultad de Medicina durante varias décadas, la doctora Barranco, que fue una de las fundadoras del Servicio de Planificación Familiar en Granada, ha sido pionera en la implantación de métodos de planificación familiar tales como los dispositivos intrauterinos (DIU) y en estudios sobre la menstruación o sobre la salud sexual femenina cuando estas cuestiones, allá por los años setenta, eran poco menos que un tabú. A la par, ha desarrollado diferentes ensayos (algunos en colaboración con el investigador Fernando Girón) que han sido imprescindibles para la recuperación de la memoria histórica democrática de figuras esenciales como la del también obstetra y rector de la UGR Alejandro Otero, exiliado tras la rebelión militar de 1936; también es la responsable de la biografía de la escritora y activista republicana Agustina González López, más conocida por el sobrenombre de “La Zapatera”, fusilada en Víznar en 1936. Hija Predilecta de Granada, ha dirigido la cátedra de Investigación Antonio Chamorro-Alejandro Otero de la Universidad de Granada.

Inmaculada Fuentes. Nacida en Granada en 1962, pertenece a la primera promoción de mujeres que entraron a formar parte de la Policía Municipal el 18 de diciembre de 1981. Con 19 años y tras aprobar las oposiciones, Fuentes Fernández se convirtió en la primera mujer que dirigía el tráfico en las calles de la ciudad. A lo largo de su dilatada carrera profesional -cuarenta años- al servicio de la ciudadanía ha pasado por diferentes destinos, desde Tráfico al 092, o la Oficina de Atención al Policía. Es ya hoy un referente en un colectivo profesional donde, todavía, las mujeres siguen siendo una minoría.

María Castellano. Jiennense de nacimiento, su trayectoria está vinculada a Granada desde sus inicios como estudiante. En la Universidad de Granada estudió Medicina y Cirugía y posteriormente se doctoró. Inició aquí su carrera docente (año 1972) pero, tras aprobar las oposiciones al Cuerpo de Médicos Forenses en 1978, se trasladó a Lieja como investigadora pionera en marcadores genético-moleculares y en identificación de indicios biológicos para determinar la paternidad.

En 1980, fue la primera mujer en obtener en España una cátedra de Medicina en la Universidad de Zaragoza, donde permaneció hasta 1996; ese año retornó a la UGR como Catedrática de Toxicología y Legislación Sanitaria, aunque finalizó su carrera docente en Alcalá de Henares. Es Académica de Número de la Real Academia Nacional de Medicina. Ha recibido diversos galardones tales como la Cruz de 1ª Clase de San Raimundo de Peñafort (por su colaboración con la Administración de Justicia), la Medalla al Mérito Policial con Distintivo Blanco por su contribución para la formación de la Policía Judicial o la Medalla de Honor del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos. En su trayectoria investigadora cuenta con más de trescientas publicaciones científicas vinculadas a la Medicina Legal y Forense.

María José Sánchez Rubio. Diplomada en Trabajo Social y Gerontología, nació en la localidad malagueña de Casarabonela, pero está vinculada a Granada desde los años setenta; aquí ha venido desarrollando su labor profesional y, a la par, su trabajo activo con los colectivos sociales, centrándose en las personas mayores y en las mujeres. Consciente de que sólo desde el ámbito político se pueden tomar decisiones que cambien los modelos de compromiso con los que menos tienen, desde los noventa ha ejercido diversas responsabilidades públicas: Delegada de Asuntos Sociales en Granada, Concejala del Ayuntamiento de Granada, Diputada, Delegada del Gobierno de la Junta en Granada, donde dirigió el primer equipo de delegados/as paritario, y ocupó dos Consejerías en la Junta de Andalucía en distintos periodos. Ha recibido diversos galardones a lo largo de su carrera. María José Sanchez Rubio es una pionera y un referente nacional en la defensa de los derechos sociales y de las mujeres, tarea en la que sigue volcada, ahora desde el ámbito asociativo.

Remedios Murillo. Nació en Granada un 5 de noviembre en los albores de los años cuarenta; pertenecía a una familia muy unida y, fiel compañera de su hermano mayor, con tres años empezó a ir al colegio donde ya reveló su capacidad de liderazgo y su habilidad para tender puentes y fomentar el diálogo. Tras acabar el PREU, estudió Filosofía y Letras. Casada y con tres hijos, desde mediados los años noventa se vincula con los movimientos ciudadanos en defensa del patrimonio y las señas de identidad granadinas. Acudió al llamamiento de la profesora y escritora Mariluz Escribano para la constitución de “Mujeres por Granada”, grupo independiente que ha venido liderando desde la retirada de Escribano en 2006 hasta 2019. Asimismo, fundó “Ciudadanos por Granada”, otra plataforma amplia y heterodoxa centrada en la preservación y defensa de la ciudad. Columnista de prensa durante muchos años en IDEAL, clara, apasionada y rotunda, Remedios Murillo es un referente ético del granadinismo militante comprometido.

EL INDEPENDIENTE DE GRANADA

https://www.elindependientedegranada.es/ciudadania/homenaje-ocho-mujeres-que-tuvieron-papel-esencial-historia-reciente-provincia

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