Presentación del libro : «El lugar de la caracola» de Susi Campos

El 13 de diciembre en el Centro Cultural Medina Elvira se presentó, ante un público entregado, el libro de Susi Campos

En primer lugar, desde Editorial Nazarí queremos agradecer a Susi Campos la confianza que depositó en nuestro trabajo y buen hacer para ser soporte físico de su creatividad literaria. También agradecer al escritor y poeta Alejandro Pedregosa todo el apoyo que brindó a Susi con su primera publicación, con su experiencia en el mundo editorial y su exquisito trato de la palabra y el verso. Y no nos gustaría olvidar las colaboraciones de Marga Blanco, que escribió el prólogo que abre el libro, y del pintor Paco Herrera, que cedió encantando la imagen de la caracola que hemos usado para componer la cubierta.

El lugar de la caracola es un poemario de lenguaje claro, sencillo, directo y de rimas suaves. Es una poesía fresca; no abusa de tópicos y tampoco de fuegos de artificio, lo que se agradece en la medida en que encontramos una lectura diferente a ese vacío que proponen desde algunas supuestas estéticas algunos/as poetas.

Las rimas buscadas, arromanzadas, o finales, le conceden una música especial al poemario, lo convierten en canto, que siempre es agradable para quienes esperan que “la poesía rime”, no siendo necesario en otras ocasiones: la poeta ejemplifica los dos polos, manejando ambos con soltura.

El contraste potente entre la voz lírica y el mundo es un dato llamativo; como la memoria y su uso, la infancia y la familia, el desapego a otro tipo de elementos en la vida actual, pero no del recuerdo, que es asidero que procura paz y desarrollo interno a esa voz.

La sensatez y la verdad de la autora parecen aflorar cuando recuerda su niñez: ya sabemos que todo es ficción, pero en casos como este, las ideas comunicadas vibran, por el lenguaje tan directo, la brevedad de lo comunicado y la esencialidad de lo dicho.

La primera parte, tras el poema introductorio, nos coloca a la caracola varada en la orilla, contemplando, sin demasiado movimiento: en la memoria agradable del pasado. La caracola varía su lugar para estar en la ola, en la segunda parte, y ya comienza la edad adulta, con sus variaciones, movimientos y negociados. Muy buen contraste, atractivo y entretenido. Y la tercera parte abre vías de exploración a otros estados, como la muerte, el deseo y la pulsión de desear un entendimiento mediante la escritura de ciertas cosas que nos duelen, bloquean o juzgan. Vuelve la memoria y ahora el recuerdo funciona como llave para abrir lo que podrá llegar en un futuro y atemperar la/s quiebra/s personales y mentales que seguro sobrevendrán.

En definitiva, creemos que El lugar de la caracola es muy interesante, equilibrado y con una estructura in crescendo, utilizando de manera efectiva la metáfora del mar, el símbolo de la caracola y la voz poética y dejando a la imaginación esos ecos de la concha, ese molusco y su naturaleza —desaparecido ya— y cómo no, la certeza de que la manera de comunicar siempre será la palabra.

Alejandro Santiago