Un total de 25 municipios de Granada perderán líneas de teléfono fijo y el ADSL por el apagón del cobre
Hasta 54 municipios de Andalucía sufren o sufrirán próximamente pérdidas de líneas fijas de teléfono. La mitad de estas se sitúan en la provincia de Granada.Este menoscabo acabará siendo parcial -con más o menos vecinos perjudicados- o total, incluso, en determinados pueblos
Hasta 25 municipios de Granada sufren ya o van a sufrir próximamente la pérdida de líneas fijas de teléfono.
Esto supone ser la mitad de las localidades de toda Andalucía que se van a quedar sin este servicio próximamente, y que en algunos casos está activo desde hace ya más de 100 años. Además, también se quedarán sin conexión a Internet de ADSL, en caso de contar con ella. Esta situación se produce por el cierre de las centrales de cobre que se están llevando a cabo a nivel nacional y que concluirá a final de año.
Este menoscabo acabará siendo parcial -con más o menos vecinos perjudicados- o total, incluso, en determinados pueblos. De esta manera, la inmensa mayoría de esas desconexiones será una realidad a lo largo de este año. Y lo sufrirá más que ninguna una provincia en la que no hay conexión de fibra óptica en muchos de 174 municipios y seis Entidades Locales Autónomas (ELA).
Los municipios de Granada que se verán afectados de forma total o parcial son Agrón, Albolote, Aldeire, Almuñécar, Alquife, Benamaurel, Castilléjar, Cortes y Graena, Escúzar, Ferreira, Gor, Ítrabo, Jérez del Marquesado, La Malahá, La Peza, Molvízar, Nívar, Ogíjares, Polopos, Puebla de Don Fadrique, Purullena, Salobreña, Sorvilán, Valle del Zalabí y Zújar.
La mayoría de ellos pertenecen a zonas de la Alpujarra o de la Costa Tropical, aunque también hay localidades del Área Metropolitana o del Norte.
Así se desprende de diversas cifras procedentes de la Comisión Nacional del Mercado de Telecomunicaciones y del Instituto Nacional de Estadística recogidas por Adamo, operador especializado en el ámbito rural, y de la investigación realizada por Granada Hoy.
Este corte de conectividad, que afecta especialmente a las localidades de menor tamaño, se debe al apagón de la red de cobre sobre el que la propia CNMC y la empresa telefónica lleva tiempo realizando comunicaciones. Como consecuencia, aquellos que carezcan ahora de fibra óptica y no migren a ella se quedarán sin teléfono fijo y sin Internet.
A este «apagón» del teléfono fijo se le suma también el apagón de telecomunicaciones que se está realizando en España y que ya se ha iniciado con la suspensión de las emisiones de las cadenas de televisión en calidad estándar. Esto ha obligado a muchos habitantes a cambiar su receptor TDT por uno que procese la emisión en Alta Definición (HD) o incluso comprar nuevas televisiones.
Los cierres previstos
El primero de los cierres de las centrales de cobre que están previstos en la provincia se producirá el próximo 30 de abril en Santa Fe. Este dejará de dar servicio a parte de la población de Escúzar o La Malahá. Después, ya el 25 de septiembre, se cerrarán las subestaciones de Albolote, Alhendín y Atarfe, que dejarán sin servicio a parte de los ciudadanos de estas localidades metropolitanas.
El 29 de octubre de este año también cerrará la subestación de cobre de Armilla, que da servicio también a una parte de Ogíjares, y una en Huétor Vega. Ya el 27 de noviembre se prevé un cierre también en Peligros de este tipo de estaciones de comunicaciones. En el Cinturón de Granada no se prevé que haya demasiadas desapariciones, puesto que la oferta de fibra óptica es amplia y son ya muchos municipios los que disponen de la instalación de este servicio.
Huétor Tájar y Cenes de la Vega, así como Purchil (Vegas del Genil) también verán como sus dos estaciones de cobre cierran, descentralizándose así las clausuras de estos centros de la zona del Área Metropolitana.
En todos los casos será necesaria la migración a la fibra óptica, lo que también mantendrá el servicio del teléfono fijo. Esto se complicará en zonas de montaña o en algunos lugares de la Costa Tropical, donde la instalación de esta tecnología no está todavía tan extendida.
La justificación de Telefónica para el cierre: el medio ambiente
El cierre de las últimas 3.329 centrales de cobre en España en los próximos meses completará el 100% del proceso en España para la digitalización de las comunicaciones. El apagado, iniciado por Telefónica al ser la empresa española la dueña de estas estaciones, comenzó de forma progresiva en 2014 y se completará 10 años después, e incluirá el cierre de un total 8.532 centrales. Todo para que las líneas sean más sostenibles.
La empresa asegura que la red de fibra de Telefónica logra reducir el impacto ambiental (energía y otros recursos materiales) hasta el 94% en España, que es 18 veces menor que el cobre ante un consumo de datos equivalente. «Esto se debe, en gran medida, a los esfuerzos previos de la compañía en términos de eficiencia energética, diseño e implantación de tecnologías e inversiones en renovables», han destacado.
“Telefónica continúa avanzando en su transformación para seguir siendo líder. El nuevo mundo digital pasa por nuestras redes”, ha destacado el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete. Además, ha añadido que “Telefónica es pionera en la aplicación de inteligencia artificial a las redes de última generación, y es una pieza clave en la descarbonización de la economía. El cierre de nuestras últimas centrales de cobre era otro compromiso de Telefónica, y Telefónica siempre cumple sus compromisos y está preparada para el futuro”.
Por su parte, el presidente de Telefónica España, Emilio Gayo, ha afirmado que su compromiso es «ofrecer la mejor conectividad a todos nuestros clientes». «Con la comunicación del apagado de todas las centrales de cobre y la decisión de dejar de dar altas en esa tecnología, avanzamos para disponer de una red fija 100% fibra».
Alternativa para 25.000 familias rurales
En esos 54 municipios andaluces que se verán afectados en los próximos meses por el cierre residen, al menos, 25.000 familias damnificadas por este apagón, una parte de las cuales se encuentra ahora en serio riesgo de aislamiento. Para evitar que sus comunicaciones queden aisladas, los consumidores deberán acceder a la red de fibra óptica que posea el municipio en cuestión, aunque en el ámbito rural será más complicado pese a la presencia de empresas que desarrollan instalaciones en este medio.
En el caso concreto de Granada, la empresa denuncia que afectaría a unas 7.000 viviendas de las 25 poblaciones citadas. En el resto de provincias, en Sevilla serían 9.000 viviendas en 12 municipios, Almería (4.500 en 6), Huelva (2.000 familias perjudicadas en 6 municipios) y Córdoba, con cerca de 2.000 inmuebles amenazados en 5 localizaciones.
En este contexto, el cambio a fibra óptica permitirá conservar el número de teléfono, el cual puede llegar a tener hasta 100 años y ser un vínculo entre parientes lejanos o de importancia para pequeños negocios.
FOTO: Imagen de archivo de un técnico de telecomunicaciones
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