Breve pero intenso diccionario de insultos políticos contemporáneos
Este texto del periodista parlamentario Carlos Santos se publicó en la revista impresa Archiletras en enero de 2023. Dado que los insultos en la política española han ido a más desde entonces, será actualizado y ampliado en breve en un nuevo número de la publicación
asesino La más grave injuria que existe desde el punto de vista estrictamente penal resuena con frecuencia a la ligera. La usaban los ultras con Carrillo, agitando fantasmas de la guerra civil; los simpatizantes de ETA con Felipe González, en tiempos de los GAL; y la izquierda radical con Aznar, en tiempos de la guerra de Irak. Aún hoy la usa la derecha con Sánchez cuando le dicen que “mercadea con los asesinos de ETA”, y cosas así, por incluir en el diálogo político a los representantes de Bildu. En 2020 un diputado llamado José Ángel Alonso llegó a decir que “los Presupuestos están manchados de sangre”.
bruja Apelativo nada cariñoso que el diputado José María Sánchez García dedica desde su escaño a la diputada Laura Barja durante el debate sobre la reforma del aborto. Expulsado del pleno en medio de una enorme bronca, se resiste a abandonar el hemiciclo, lo que obliga a suspender la sesión durante seis minutos.
C.T. Iniciales de una diputada cuyo nombre no viene a cuento (¿por qué regalar un minuto de gloria a quien lo busca con malos modos?) que saltó a la fama por sus groseras descalificaciones personales, trufadas de machismo troglodita, a la ministra Irene Montero. Pronunciadas en sede parlamentaria el 23 de noviembre de 2022, consiguieron al menos unificar doctrina en materia de agresividad retórica: una cosa es el insulto, que cada cual puede manejar con mejor o peor criterio, y otra la violencia política, ya sea física o verbal, que la inmensa mayoría de los ciudadanos repudian.
canalla Insulto dedicado, junto con el de “imbécil”, por un anónimo culiparlante del grupo popular al abogado Joan Coscubiela, diputado en Cortes por Barcelona, cuando pedía explicaciones por el caso Bárcenas.
canallesca Adjetivo que en los consejos de ministros presididos por Carlos Arias Navarro (lo ha contado uno de sus ministros, José María de Areilza) se aplicaba en los años 70 a la incipiente prensa libre. La expresión “prensa canallesca”, popularizada por el ultraderechista Blas Piñar, derivó en el sustantivo “la canallesca”, que hicieron suyo enseguida los humoristas de la época.
catastrofista El hecho de que este fuera uno de los calificativos más sonoros que en los primeros años de la democracia dedicó Felipe González a Manuel Fraga, que se pasaba la vida vaticinando desgracias, da una idea del guante blanco con el que se trataban los políticos de esa época. Eran incluso infrecuentes palabras como “oportunista” o “demagogo”, a pesar de que todos empezaban ya a practicar la demagogia y el oportunismo. Entrado el siglo XXI, en su famoso Discurso de los 37 Insultos, Pablo Casado hizo su particular guiño a la historia describiendo al presidente Sánchez como “una catástrofe para el futuro de España”.
comunista La nueva derecha española usa en tono insultante esa palabra, olvidando el trascendente papel que los comunistas tuvieron en la construcción del actual Estado democrático, en el pacto constitucional y en la redacción de la propia Constitución.
corrupta/o Adjetivo utilizado frecuentemente en la política española, en algunos casos es una injuria (cuando el destinatario es inocente) y en la mayor parte una constatación de la evidencia.
decoro parlamentario Honor, respeto, que se debe al Parlamento por su condición o dignidad. Expresión en desuso.
desleal Dícese de quien no guarda la debida lealtad a una organización o una causa y a quien no es fidedigno, verídico ni fiel en el trato o en el desempeño de un cargo. Dícese con frecuencia, en la política española, y dícese con razón, en algunas ocasiones.
dictador En el debate de investidura de Pedro Sánchez, el entonces dirigente del Partido Popular (versión actual de Alianza Popular, creada por siete ministros del dictador Franco) acusó al candidato de una “deriva dictatorial” mientras el portavoz de otro grupo parlamentario, de confesas simpatías hacia la dictadura franquista, habló de “dictadura delegada”. Al difunto dictador sorprendería esta manera de retorcer el lenguaje, por lo que supone de deslealtad con la propia historia de quienes lo hacen. La palabra dictadura algunos solo deberían usarla como piropo.
ególatra Dícese de quien profesa culto, adoración o amor excesivo de sí mismo, condición que a duras penas casa con la de demócrata y menos con la de presidir el gobierno de un estado democrático. Según el efímero presidente del PP Pablo Casado, el nada efímero presidente del Gobierno Pedro Sánchez peca de “egolatría (…) mientras destroza España”.
escrache Manifestación a medida en la que en un grupo de ciudadanos acosa verbalmente a un dirigente político, en la calle o en las inmediaciones de su casa, incluyendo con frecuencia insultos y descalificaciones personales. Pese a que algún dirigente de Podemos (1ª Época) calificó estas prácticas como “jarabe democrático”, cuando fueron víctimas de acosos similares optaron, con buen criterio, por llevarlos a los tribunales.
facha 1. Adj. Despect. Coloq. Fascista. Apl. A pers. U.t.c.s.
fascista Palabra polisémica, cuya aplicación actual no siempre se corresponde con el origen histórico del fascismo, doctrina política de infausto recuerdo. Con frecuencia se produce una peligrosa banalización del concepto, en menoscabo de la memoria de las víctimas del totalitarismo fascista. A veces se utiliza para calificar a personas o actitudes contrarias a los usos democráticos. Otras, como sinónimo de retrógrado o reaccionario. Algunas, con su tenebroso significado histórico, que algunos todavía reivindican o practican. Los independentistas de ERC la usan para responder a quienes desde la derecha los llaman “golpistas”. Su portavoz Rufián habla incluso de “jueces fascistas”, incurriendo en evidente contradicción: en un país con jueces fascistas es improbable que pudiera proferir semejante boutade.
felón Adjetivo de origen medieval rescatado en el siglo XXI por el estadista español Pablo Casado. Se aplicaba en la Edad Media a quienes cometían delito de felonía, consistente en el incumplimiento de las obligaciones del vasallo con su señor. Usado luego como sinónimo de traidor o desleal, fue por un tiempo apodo de Fernando VII, que pasó de ser de El Deseado a El Rey Felón y como tal fue recordado durante décadas, hasta que Nieves Concostrina lo bautizó como El Mastuerzo.
feminazi Insulto dedicado con frecuencia desde la derecha y medios de comunicación afines a las feministas radicales, ofendiendo no solamente a esas feministas, sino a la propia razón histórica, ya que trivializa la importancia histórica de la lucha por la igualdad entre las personas y banaliza el horror nazi. Vid. Nazionalista
filibusterismo De vez en cuando escuchamos en el Parlamento que alguien acusa al prójimo (estas cosas siempre las hace el prójimo) de “filibusterismo”. No están claros los vínculos entre el filibusterismo parlamentario y el de los piratas del Caribe. La expresión se refiere a las prácticas encaminadas a entorpecer el natural desarrollo de los trabajos parlamentarios; a impedir por métodos torticeros, y no por la fuerza de la razón o la de los votos, que un acuerdo o una iniciativa salga adelante en tiempo y forma. Algo parecido, salvando las distancias, a lo que estamos viendo en el Poder Judicial.
filibustero Que practica el filibusterismo.
gánster Último de la retahíla de invectivas que en abril de 2017 Gabriel Rufián dedicó al ex director de la Oficina Antifraude de Catalunya, Daniel de Alfonso.
gentuza Usado por Pablo Iglesias en referencia a Esperanza Aguirre y a otros dirigentes del PP madrileño. A la lideresa la llamó además “dama de la corrupción”.
gilipollas Improperio proferido en noviembre de 2021 por un diputado de la ultraderecha a la ministra María Jesús Montero, que estaba en el uso de la palabra. En 2004 el presidente manchego José Bono estuvo a punto de provocar un conflicto diplomático cuando fue captado por una cámara llamando “gilipollas” al premier británico Tony Blair. Ese mismo año el diputado aragonés Labordeta se dirigió en estos términos al diputado Aragonés, del PP: “¿Qué haces con el puño cerrado? El puño cerrado lo llevo yo. ¡No me lo cierres tú, gilipollas!”.
golpista Término que desde el PP se aplica a dirigentes y parlamentarios de Esquerra Republicana y otros partidos implicados en el procés catalán; con frecuencia se incluye en las diatribas dirigidas a Sánchez y su Gobierno, acusados de “pactar con golpistas”. La acusación no tiene sustento legal (esos hechos ya han sido juzgados y son otros los delitos) y rebaja o ningunea la dimensión histórica de los golpes del estado, actos violentos contra la democracia que, como se sabe, pueden derivar en dictaduras.
hijo de puta En un diccionario de insultos políticos españoles no puede faltar el más repetido de todos, sobre todo cuando el destinatario natural de ese insulto no está delante o cuando se profiere desde el anonimato que da la masa o, en su caso, el vocerío de un grupo parlamentario. No es original, pero es frecuente y es, desde luego, el número uno de los cuarenta principales en las broncas internas de los partidos políticos.
hijoputa 1. M. malson. Esp. Hijo de puta. U.c. insulto.
ilegítimo Aunque no sea de los más sonoros, es uno de los más graves insultos que se pueden arrojar contra quien ocupa un alto cargo en una democracia. No solo cuestiona la figura del insultado, sino el correcto funcionamiento del mecanismo de elección. Cuando lo usa un dirigente de la oposición o un tertuliano contra un presidente del Gobierno —ha ocurrido con frecuencia en la actual legislatura— provoca una erosión en la credibilidad del propio sistema. Lo mismo ocurre cuando lo utiliza Donald Trump contra Joe Biden. O Bolsonaro contra Lula da Silva.
incompetente Hay quien lo utiliza sin fundamento, como insulto, pero, qué quieres que te diga, en muchos casos es una descripción desapasionada que igual deberíamos utilizar todos con más frecuencia a la hora de describir a personajes que hacen pública exhibición de sus limitadas habilidades para el ejercicio de las responsabilidades para las que han sido elegidos o por las que cobran un sueldo publico. (Vid. Mediocre).
indecente Pedro Sánchez El Resistente (el mote se lo puso él mismo, cuando publicó un libro titulado Manuel de Resistencia) es el presidente que más insultos ha recibido en el actual periodo democrático. Si se contaran los que le dedican reputados líderes de opinión y los que en su día le dedicaron en privado dirigentes de su propio partido, no habría páginas en Archiletras para recogerlos. Por su parte, solo ha enseñado los dientes en contadas ocasiones; la más sonada, en el debate electoral de 2015 en el que llamó “indecente” a Mariano Rajoy. “El presidente del Gobierno tiene que ser una persona decente y usted no lo es”, dijo textualmente. Rajoy respondió que esa era “una afirmación ruin, mezquina y miserable”.
indigno 1. adj. Que no tiene mérito ni disposición para algo. Lo llamó Casado a Sánchez (Casado llamó de todo a Sánchez, en realidad) y lo llamó Rufián a Josep Borrell, entonces ministro de Exteriores (“usted es el ministro más indigno de la historia de la democracia española”) que no se quedó callado: “Una vez más ha vertido usted sobre el hemiciclo esa mezcla de serrín y estiércol que es lo único que es usted capaz de producir”, le respondió.
inepto Insulto n.º 7 de los 37 que, según las cuentas de Adriana Lastra, Pablo Casado dedicó a Pedro a Sánchez para explicar su voto en contra de la prórroga del estado de alarma en mayo de 2020.
inútil Una de las múltiples referencias del famoso Catálogo Casado, sus compañeros de partido la utilizan con frecuencia, quizá como homenaje póstumo. Víctor Valentín Pérez, diputado del PP por Badajoz, habló desde la tribuna parlamentaria de “la inútil y soberbia ministra de Igualdad”, Irene Montero.
irresponsable Casi todos los presidentes del Gobierno han sido en alguna ocasión tachados de “irresponsables” por la oposición. Si se recuerda la definición de la RAE (1. Adj. Dicho de una persona A quien no se puede exigir responsabilidad. U.t.c.s.) sería más adecuado llamarlos “responsables”: de sus actos, de sus errores, de sus desaguisados…
ladrón Está extendida en España la idea de que “los políticos roban”, idea que en algunos casos se ha convertido en sentencia firme y en otros ha quedado en acusación sin fundamento. Personajes públicos contemporáneos, como Gabriel Rufián o Pablo Iglesias, no tienen problema en llamar “ladrones” a otros (en particular a dirigentes del PP) sin esperar esa sentencia firme que en muchos casos se produce. Iglesias se muestra incluso orgulloso “de pertenecer a una formación política áspera que llama a las cosas por su nombre”.
llorona No solo “inútil” y “soberbia”. La ministra y dirigente de UP Irene Montero ha sido durante años objeto de los insultos, con frecuencia trufados de machismo cavernícola, proferidos por políticos de la derecha y periodistas afines. Ella misma los ha recordado en alguna ocasión: “llorona”, “caprichosa”, “infantil”, “histérica”. “bruja”, “puta”, “pederasta”, “inútil”, “soberbia”…
maricomplejines Así llamaba un afamado locutor a Mariano Rajoy Brey en sus años de candidato a la Presidencia del Gobierno, suscitando enorme entusiasmo entre algunos compañeros de partido del motejado.
mariposón 1. m. despect. coloq. Hombre inconstante y caprichoso en su dedicación a algo, y especialmente en el galanteo con las mujeres. U. t. c. adj. 2. m. eufem. coloq. Hombre homosexual. Cuando el expresidente Alfonso Guerra dedicó este vocablo al presidente Mariano Rajoy, luego tuvo que aclarar, a instancias de colectivos LGTBI, que lo utilizaba en su primera acepción.
mediocre Hay quien lo utiliza sin fundamento como insulto, pero, qué quieres que te diga, en muchos casos es una descripción desapasionada que igual deberíamos utilizar todos con más frecuencia a la hora de describir a personajes que hacen pública exhibición de sus limitadas habilidades para el ejercicio de las responsabilidades para las que han sido elegidos o por las que cobran un sueldo público. (Vid. incompetente).
mentiroso compulsivo Descalificación n.º 6 de las diecinueve que Pablo Casado dedicó al presidente Pedro Sánchez el 6 de febrero de 2019, con motivo del debate sobre la figura del relator en el diálogo con las fuerzas políticas catalanas.
miserable Uno de los apelativos favoritos del estadista Rufián a la hora de referirse a contrincantes políticos de Ciudadanos, del PP y PDeCAT o a los jueces o al rey Felipe. Utilizado en una ocasión contra el ministro Zoido (“le pedimos que dimita por miserable y por irresponsable”), se negó a retirarlo del Diario de Sesiones alegando que se refería a la acepción “extremadamente tacaño”. Como quien a hierro mata a hierro muere, tres años después será un diputado de Junts Per Catalunya, Jordi Sánchez, quien le ponga a él tal etiqueta.
nazionalista Al igual que el apelativo feminazi, repugna a la razón histórica la utilización de este término, dedicado en ocasiones al nacionalismo catalán, porque, como ha escrito el filósofo José Antonio Marina, implica “un desprecio a la memoria de millones de personas que murieron víctimas de la barbarie”. No es infrecuente ni es exclusivo de la política española que, cuando se agotan los argumentos, se agite el espantajo del horror nazi, trivializando ese concepto.
okupa Last but not least de las 19 descalificaciones que dedicó Pablo Casado a Pedro Sánchez el 6 de febrero de 2019. Al compararlo con quienes se instalan en una casa ajena, Casado niega a Sánchez la legitimidad para ocupar un cargo al que ha llegado como resultado del ejercicio de la soberanía popular.
Pavía, caballo de Entre las descalificaciones personales más injuriosas que sonaron en España durante la transición, figura la que dedicó el socialista Alfonso Guerra al presidente Adolfo Suárez: “Si el caballo de Pavía [general golpista del siglo XIX] entrara en el Parlamento, el actual presidente de este Gobierno se subiría a la grupa de ese caballo”. Años más tarde confesó Guerra que “fue una frase idiota, al bajar de la tribuna ya tenía conciencia del error”. No fue un error, fue un disparate histórico.
rata chepuda Leitmotiv de una campaña emprendida por la extrema derecha en las redes sociales con el objetivo de deteriorar la figura del vicepresidente Pablo Iglesias. Y quizá no solo de deteriorarla. Como él mismo hizo notar, señalar a una persona como rata puede implicar una invitación a su exterminio.
Régimen del 78 La dictadura de Franco se presentaba a sí misma como “el régimen”, que venía a ser la versión castiza del “Reich” alemán. En sus primeros años, los dirigentes de Podemos hablaban en términos despectivos e insultantes del “Régimen del 78” para referirse a la democracia emanada del pacto constitucional, que, según les dio por decir en esos años, se había fraguado “en los despachos”. Olvidaban que esa democracia es una de las más avanzadas de la tierra y el papel que en su construcción tuvo, desde la calle y desde las instituciones, la izquierda represaliada por la dictadura. Actualmente, ambos conceptos (el del régimen y el de los despachos) han desaparecido del discurso de UP.
sociópata 2. M y f. Med.- Persona que padece sociopatía. Sociopatía. 1.f. Med. Trastorno de la personalidad caracterizado por comportamientos antisociales. Una de las cosas más raras que un jefe de la oposición (Pablo Casado) puede llegar a decir a un presidente del Gobierno (Pedro Sánchez).
terrorista Aunque han pasado más de doce años desde que la banda terrorista ETA cometió su último crimen, con frecuencia se escuchan en presente expresiones como “terroristas”, “amigos de los terroristas”, “socios de los terroristas” o “pactar con terroristas”.
terrorista, hijo de Así llamó la diputada Cayetana Álvarez de Toledo, por un tiempo figura estelar del PP, al diputado Pablo Iglesias, por un tiempo vicepresidente estelar del Gobierno.
tirano La periodista y política madrileña Isabel Díaz Ayuso, cuya habilidad para abrirse paso en el poder con una medida mezcla de insultos, mentiras y medias verdades es de las más notorias de la política española del siglo XXI, leyó el 30 de noviembre de 2022 la siguiente acusación contra el presidente del Gobierno: “Vamos camino de una dictadura sometidos por un tirano que pone en peligro el Estado de Derecho”. Ahí queda eso.
traidor Término común en la tragedia clásica, los libros de Historia, el refranero (“quien avisa no es traidor”) y la industria cinematográfica almeriense, donde el traidor es quien trae el agua a los caballos, en la transición lo dedicaba la derecha franquista, que entonces creíamos residual, a quienes, como Adolfo Suárez, intentaban construir una democracia. En los años 90, el término solía ir acompañado por el de “tránsfuga” (“tránsfuga, traidor”) y en el siglo XXI Pablo Casado lo rescató para la gran política calificando reiteradamente de traidor a Pedro Sánchez, unos meses antes de ser él mismo traicionado por sus compañeros de partido.