PARTICIPACIÓN CIUDADANA: LA MEJOR FORMA DE VIVIR EN DEMOCRACIA.
ARTICULO PUBLICADO POR EL «MIRADOR DE ATARFE EN PAPEL» EN EL AÑO 2002 POR FRANCISCA FUILLERAT
Hace unos años, cuando se hablaba de participación ciudadana, era imprescindible apoyarse en los textos en los que viene pertinentemente regulada su existencia. Me refiero a la Constitución Española de 1978 y cómo no, a la Ley de Bases de Régimen Lo cal de 1985.
Nuestra sociedad ha evolucionado, las mujeres y los hombres de Andalucía hemos realizado un breve pero intenso camino, y ello nos da la posibilidad de haber asumido la tal participación como un derecho, que yo me atrevería a catalogar de “fundamental”.
Como tal derecho, y dependiendo de las circunstancias de cada ciudad o municipio, hoy nos encontramos con multitud de fórmulas, que canalizan las ganas de implicarse de la ciudadanía en la resolución de los problemas que se van planteando. El sistema democrático prevé la participación, ya sea a través de la afiliación a un Partido Político o a un Sindicato, y también como no, regula el funcionamiento de las Asociaciones sin ánimo de lucro, en las que se inscribe un numeroso grupo de personas que elige teniendo en cuenta la ideología o simplemente el deseo de ofrecer parte de su tiempo de ocio a una tarea desinteresada.
Los planos están claros, pero ello no impide que conozcamos a personas, que por diversos motivos, utilizan unos espacios para fines que no le son propios. Pongo por ejemplo el caso de personas que tras su paso por diferentes partidos políticos, incluso de ideología encontrada, acaban recalando en una Asociación, e intentan implantar métodos de trabajo, que como ya dije no le son propios, y que no garantizan la consecución de los objetivos propuestos.
Frente a estas situaciones, la madurez del movimiento asociativo derivada de una larga experiencia de participación, constituyen los correctivos más certeros.
En Atarfe, la Corporación Municipal tuvo el acierto de aprobar el Reglamento del Consejo Municipal de Participación Ciudadana, en la sesión del Pleno ce lebrada el dieciocho de junio de mil novecientos noventa y siete.
Se trataba de un órgano presidido por el Alcalde, y en el que se encontraban presentes: la Concejala de Participación Ciudadana, Concejalas/es de las diferentes Comisiones y las/os Presidentas/es de las distintas Asociaciones o Entidades representadas en las Comisiones Sectoriales.
En su momento, dicha iniciativa supuso un gran paso en el acercamiento de la ciudadanía a los asuntos municipales, pero estaba claro, que la lógica evolución del movimiento asociativo local, exigía una estructura de participación más especializada, y que propiciara que el abordaje de los problemas de una forma más homogénea, y sobre todo y lo que es más importante, era necesario facilitar más autonomía al tratamiento de los temas sectoriales.
Todo esto, que aparentemente es muy complicado, se resuelve de una forma muy sencilla. Atarfe no va a seguir teniendo un órgano único para recibir todas las aportaciones que vecinas y vecinos desean hacer, sino que el proyecto de participación que será aprobado en el próximo Pleno, va a facilitar la colaboración entre las Asociaciones y Entidades que intervienen en un determinado sector (mujeres, servicios sociales, cultura, deportes, juventud, medio ambiente, etc.) y la/el Concejala/l competente del sector en cuestión, contando con el apoyo de una Comisión Ejecutiva para desarrollar sus funciones y su correspondiente Asamblea General.
No es la única novedad, ya que, junto a la creación de los Consejos Municipales Sectoriales, consideramos que ya es tiempo de que los Partidos Políticos tengan cabida en la nueva estructura, debido principalmente a la objetiva normalidad de relaciones que reina entre las opciones que conforman laCorporación Municipal, muy distante del ambiente allá por 1997.
La existencia de los diferentes Consejos Municipales Sectoriales, no va a impedir, que para tratar asuntos de interés general, el Alcalde utilice sus competencias, y convoque a todo el pueblo, Asociaciones y entidades, como lo ha hecho en varias ocasiones a la largo del último año (remodelación de la Calle Real, Sierra Elvira y Colgra), circunstancias en las que el Salón de Plenos ha abierto sus puertas, cumpliendo con ello un mandato constitucional.
Pero aún hay más. Nos planteamos crear un Consejo que aglutine a las Asociaciones de Vecinas y Vecinos del municipio, por considerar que conforman un sector global y específico de participación, con la incidencia y relevancia suficientes como para disponer de un espacio de participación propio: Consejo Municipal.
En estrecha relación con este proyecto, andamos en fase avanzada para poner en marcha lo que será la primera Alcaldía de Barrio, que pretende dar forma a un recurso que facilitará la eficacia y agilidad, en la resolución de aquellas situaciones que puedan suponer un obstáculo para el normal desarrollo de la vida de las personas residentes en Atarfe y sus Anejos.
La vida del movimiento asociativo de nuestro pueblo es muy dinámica, lo que se pone de manifiesto al observar su respuesta ante los diversos llamamientos, que desde el Ayuntamiento se han realizado.
Esto supone un caudal de participación que es necesario encauzar, de forma que sea eficaz y operativa, en definitiva para que consiga el objetivo propuesto: mejorar la calidad de nuestras vecinas y vecinos, objetivo que es compartido unánimemente por toda la Corporación Municipal.
Este proyecto supone seguir cumpliendo con el compromiso adquirido el 13 de Junio de 1999 con el pueblo de Atarfe, y avanzar en el fomento de la con vivencia y el desarrollo de Atarfe, de las Atarfeñas y los Atarfeños.
(*) Artículo escrito para la Revista JARA y el Mirador de Atarfe en 2002