¿MOVIL PARA LOS MENORES?
Nada de móvil para menores de 12 años, y sin whatsapp hasta los 16: la Policía explica los peligros
Esther Arén Vidal es Inspectora Jefe del Cuerpo Nacional de Policía y se especializa en la lucha contra el acoso a menores y los ciberdelitos relacionados con ello en España. En una entrevista radiofónica en Onda Cero explica por qué los abusones de hoy son distintos en su forma de operar a los abusones de colegio en otras épocas, y cómo Internet en el móvil es un peligro para los chicos.»Siempre te dicen: ‘es que eso del acoso ha ocurrido toda la vida’. No. Ahora es una realidad completamente distinta. Antes, en el acoso escolar, había una pruebas, lo veías, había testigos. Ahora, en cambio, todo sucede a través de las redes«, explica.
No se trata solo del acoso con insultos o amenazas por Internet (el cyberbulling), sino también del sexting (enviar o solicitar fotos con contenido sexual, que a veces se hacen los adolescentes para presumir, o presionados, y luego ven espantados que circulan por doquier) o del grooming (adultos que buscan hacerse amigos digitales de niños o adolescentes para obtener datos de él y luego servicios sexuales, por seducción o chantaje).
Antes de los 12, sin móvil; antes de los 16, sin whatsapp
«Si le das a un menor un coche con catorce años, sin carnet de conducir, sin acompañarle, está claro que no quedará ileso. Ahora a los niños de menos de 14 años le estamos dando terminales de última generación para que vayan a 200 por las redes sin que tengan idea. Dicen: ‘es que el niño es el que sabe’. No: el niño es el que más lo usa, pero no tiene ni idea», previene.
«Los especialistas dicen que con menos de doce años no se les debe dar un móvil, y menos con conexión a Internet. Whatsapp no se debe tener hasta los 16 años, lo dice la propia red Whatsapp, y eso casi nadie lo sabe».
Una opción para padres es que se habilite una función del móvil del chico que envíe copias de todos los mensajes de whatsapp a un correo que los padres revisan. Así se detecta a los abusones, predadores sexuales, etc… y quedan pruebas.
Instagram, Twitter… y los gurús de YouTube
La inspectora tiene un hijo de 10 años y una hija de 14, y aprende mucho por ellos de cómo los niños y adolescentes viven su relación con el móvil. Hoy los niños no están ni en Facebook ni en Tuenti, sino en Instagram, en Twitter y en YouTube.
Advierte así: «Ojo con los youtubers. Hoy todos los niños de 11 años piden cascos en Navidad, para escuchar en el ordenador a un youtuber que es un auténtico gurú para él. Acabo de tener un debate con mi hija de 14 años sobre los toros que me ha dejado alucinada, y sus argumentos los ha sacado de un youtuber».
¿Por qué hay niñas con 10 años, con Instagram que se hacen selfies, cuelgan sus fotos en Instagram y que son localizables por geolocalización?, pregunta la inspectora. «A esa edad no son conscientes de que una vez publicas la foto pierdes el control sobre ella».
Cuidado con las fotos
La inspectora recuerda que «donde hay niños, van los pederastas», y buscan fotos, por ejemplo, de niños en la playa, «esas que comparten los papás».
Hay algunas señales que denotan que un niño o adolescente, con móvil o enganchado al ordenador, está siendo acosado. A partir de cierto momento no quieren ir a clase, muestran síntomas físicos -dolores de cabeza, de barriga-, muestran que ya no quieren entrar en un grupo de whatsapp en el que estaban continuamente… esas son señales para investigar.
Ahora la Policía ya no da solo charlas en colegios sobre el tema, sino a grupos de padres y también a los pediatras, que pueden detectar estos síntomas.
La Inspectora Arén pide que cuando haya acoso se denuncie en comisaría y se trate «como delito, no como un simple conflicto», aunque los acosadores tengan 13 años y desde luego no vayan a entrar en prisión «pero que vean que las acciones tienen consecuencias».
La inspectora asegura que a los 10 y 11 años, los niños que abusan pueden aprender bien a dejar de hacerlo, los policías se lo explican y ellos cambian. El problema viene cuando a los abusones no se les educa, se les deja hacer, y cometen el abuso digital contra otros a los 14 años, cuando ya hay serias responsabilidades penales.
Además, los policías, sólo con dar una charla en una clase de colegio en instituto, ya detectan la situación: «la niña que hace sexting se pone colorada, el malote te mira desafiante, la víctima busca tu apoyo…»