«LA FABRICA DE CEMENTO DE ATARFE»por José Enrique Granados
En el especial de las fiestas de IDEAL del año 2007, escribimos sobre la competencia industrial en el Atarfe de principios del siglo XX.
Transcribimos para ello la memoria efectuada por D. Alfonso de la Cámara Jiménez en 1904, dedicada a los vecinos del pueblo de Atarfe, y a las personas con quienes el Sr. Cámara tenía compromiso de formar una sociedad para establecer una fábrica de cementos que tuviera como materia prima una de las canteras calizo-arcillosa existentes en nuestro municipio. La concesión fue efectuada por el ayuntamiento atarfeño en 1902. Sin embrago el Sr. Cámara fue desposeída de la misma dos años más tarde, motivo que le llevo a escribir la memoria. En aquel documento podíamos leer:
D. Alfonso de la Cámara Jiménez, licenciado en ciencias físico-matemáticas, natural de Almería y vecino de Granada, con cédula personal número 3458, expedida en Granada en 17 de Mayo de 1904, á V.S. con el debido respeto expone: que enterado el 26 de octubre del contenido de la comunicación que ese ayuntamiento me dirige con fecha 19 del mismo, me veo en la ineludible necesidad de contestar a ella, con el respeto que esa corporación merece. El expresado documento, dice así:
“El Ayuntamiento de mi presidencia en sesión ordinaria del 15 del actual, vista la concesión que a usted fue otorgada en 25 de enero de 1902, para extraer y aprovechar en la fabricación de materiales de construcción las sustancias calizo-arcillosas que existieran dentro de los límites de una zona que demarcó en el paraje denominado Barranco de las Zorreras, secanos próximos al Cortijo de las Monjas de este término, teniendo en cuenta que a pesar del tiempo transcurrido no ha planteado la explotación de dichas sustancias, ni ejecutado acto alguno que signifique tal propósito, con evidente perjuicio de los intereses comunales y considerando tal abandono como renuncia, o como infracción de los términos en que la autorización fue concebida, en la que, al no haber señalado plazo, se entiende en buenos principios de derecho, otorgada para su inmediata explotación, la expresada corporación de mi presidencia, a propuesta del Sr. Regidor-Síndico por unanimidad acordó, tener por abandonada y declarar caducada la autorización de referencia, para extraer y aprovechar los materiales existentes en la zona denunciada y que se participe a usted esta resolución, advirtiéndole, que por estar adoptada en materia de su exclusiva competencia, es ejecutiva.
Lo que comunico a usted, para su conocimiento, sirviéndose firmar al margen el recibí del duplicado, igual a la presente. Dios guarde a usted muchos años, Atarfe 19 de octubre de 1904”. (El Alcalde, Juan de Dios Osuna).
Curiosidades elvirenses.