Rivalidad malsana
Washington y Pekin no pueden trasladar su choque a la lucha contra la pandemia
El mundo se enfrenta, con la expansión de la Covid-19, a una emergencia global sin precedentes y lo último que necesita es que sus dos potencias económicas más importantes —que ya rivalizan en el campo militar— se enzarcen en una carrera de gestos hostiles y rupturas de puentes de comunicación. Todo esto enrarece, y hasta podría llegar a poner en riesgo, el imprescindible consenso internacional para vencer a la pandemia.
Mientras sociedades de todo el mundo están dando un histórico ejemplo de responsabilidad y sacrificio, poniendo por encima de cualquier interés particular la lucha contra la expansión del coronavirus, los Gobiernos de EE UU y China parecen estar exacerbando una rivalidad malsana, trasladándola a aspectos tan vitales como la búsqueda de una vacuna efectiva.
De las guerras siempre emergen potencias ganadoras, pero en esta ocasión lo fundamental es la victoria en sí misma. Y, les guste o no a sus Gobiernos, China y EE UU ahora están en el mismo campo.
https://elpais.com/elpais/2020/03/22/opinion/1584881866_410869.html
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