Bruselas acuerda la reforma del IVA: tipos reducidos en productos sanitarios y ecológicos
La UE da más libertad a los países para fijar tipos reducidos e incluso cero para servicios básicos
Casi cuatro años de negociaciones han sido necesarios para poner en marcha una profunda reforma del sistema de tipos del IVA en Europa. Y los resultados han sido presentados este martes en la reunión de los ministros de Economía de la UE, en un texto que, aunque deja claro que los tipos reducidos deben ser la excepción, otorga más libertad a los países para aplicarlos. Y también el tipo cero.
La primera consecuencia de la medida para España será que el Gobierno podrá seguir aplicando el tipo cero a productos sanitarios como las mascarillas que ya se impuso con la llegada de la pandemia y cuya aplicación vencía el próximo 31 de diciembre. Desde el Gobierno indican que «hay margen» para extenderlo en términos de no dañar los ingresos fiscales, pero habrá que esperar para confirmar si finalmente se extiende la medida, ahora que no se necesita el visto bueno de Bruselas.
El texto, además, amplía la lista de productos que podrán verse beneficiados por este IVA reducido o por el tipo nulo. Por ejemplo, y según consta en el comunicado remitido por la Comisión Europea tras el anuncio, entrar a formar parte todos aquellos servicios que favorezcan la transición verde y la digitalización de la economía. En este último punto citan, por ejemplo, las retransmisiones en streaming de eventos deportivos o culturales y los servicios para favorecer el acceso a Internet.
Pero el primero, el de la transición verde, es la principal novedad del nuevo sistema. En su comunicado, la Comisión Europea apunta de forma específica a ciertos productos que se podrán incorporar a la lista de tipos reducidos, como las bicicletas o los paneles solares que se instalen en edificios públicos o privados o los sistemas de calefacción ecológicos.
Además, de aquí a 2030 todos los países tendrán que eliminar los tipos reducidos que mantienen en productos que tengan un impacto negativo sobre el medioambiente. Es el caso de los combustibles fósiles.
Aunque se insiste en la idea de que los tipos reducidos deben ser los mínimos, el IVA sí se flexibiliza al ampliar el número de tiops disponibles. Ahora, existe un tipo de al menos el 15% y uno reducido de no menos del 5% para dos tipos de servicios.
Con la nueva normativa, habrá cinco tramos distintos: el tipo normal desde el 15%, dos reducidos entre el 5% y el normal que podrán aplicarse a una lista de 24 categorías, uno superreducido y un tipo nulo que hasta ahora solo existía en algunos países. En estos dos últimos tramos entrará un máximo de siete productos y servicios, que en todo caso sirvan para cubrir necesidades básicas, como medicinas, productos farmacéuticos o alimentos.
La pregunta ahora es cuándo entrará en vigor la reforma, pues todavía debe pasar por la Eurocámara, que tiene un plazo de tres meses, hasta marzo de 2022, para dar el visto bueno a la medida.