Metro viene de metropolitano
No se ha terminado de apagar el eco de la polémica del metro por el centro de Churriana cuando ha estallado la de otro centro métrico. En este caso, el de Granada.
Que el metropolitano acabará pasando por ahí es más que probable, a la vista del éxito cosechado por la infraestructura. Que no habrá tuneladora capaz de profundizar por debajo del Darro, pienso que también es incuestionable: irá por superficie. La pregunta es cuándo.
IDEAL ha publicado los planes de la Junta de Andalucía en este sentido, con dos puntos particularmente calientes: Reyes Católicos, tan estrecha y con el río por debajo; y el bulevar de Avda. de la Constitución. ¡La de comentarios que está provocando el tema!
Paco Cuenca se ha encendido y al grito de «¡Sevilla no me manda!» apela al consenso, dejando caer que la ampliación por la Chana y Genil es prioritaria dado que, sobre todo este ramal, abriría las puertas viarias a La Zubia, Huétor Vega y Cájar.
Efectivamente, como sostiene el regidor granadino, la vocación del Metropolitano, como su propio nombre indica, es… ¡eso! ¡Metropolitana! Y antes que empezar a pelearse por la capital, habría que mirar a municipios como Vegas del Genil, Atarfe, Santa Fe, Fuente Vaqueros, Chauchina y, por supuesto, el aeropuerto.
La anunciada ampliación llegaría precisamente hasta Atarfe por su ramal norte, pero es insuficiente. Lo escribía en esta misma sección hace unos meses: «Hay que pensar la Granada del futuro inmediato en clave metropolitana, sí o también. Por ejemplo, resulta mucho más perentorio llevar el Metro a los pueblos de la Vega que encastrarlo en el centro de la ciudad».
Recordaba entonces los pasos que se estaban dando en ese sentido. «Un goteo de informaciones que lo mismo hablan del taxi metropolitano, con 600 vehículos que unirán 10 pueblos y prestarán servicio a 340.000 vecinos, al refuerzo de las líneas de autobuses que conectan la capital granadina con los pueblos del cinturón. O la nueva vía peatonal que unirá el Zaidín y el PTS con Armilla. Una Granada más ambiciosa y unida. La Granada de pasado mañana».
Esperemos que la sangre no llegue al río y que las diferentes administraciones se sienten a dialogar. Como granadino del Zaidín, nada me vendría mejor que dos ramales del metro, uno por el Camino de Ronda y otro por Puerta Real. Pero entiendo que son otras las necesidades más urgentes.
El objetivo de las políticas metropolitanas, que exigen alturas de miras, es evitar que la gente coja el coche, combatir los atascos en la circunvalación y reducir los niveles de contaminación. Para eso, cuantos más pueblos, incluyendo los polígonos industriales, tengan parada de metro, mejor para todos. Ahora, y en el futuro.