Los anuncios más sexistas, falsamente ecologistas y sobreconsumistas de 2015

Ecologistas en Acción otorga los ‘Premios Sombra‘ a los peores anuncios del año. Los galardonados se destacan por ofrecer valores sexistas, xenófobos, insolidarios, consumistas o venden productos ecológicos sin serlo. El ganador es “Canarias” de Repsol, con un 34% de los votos. Los finalistas han sido PorkerStars, El Corte Inglés, Banco Santander, Knorr-Uniliever, Ford, Litoral-Nestlé y Toyota, cada uno en su categoría. Los premios se llevan celebrando desde 2008 y se entregan en base al criterio del Jurado y del público.

Lavado Verde

El finalista es Repsol con un 34% de los votos. Se encuentra dentro de la categoría “Lavado Verde” que recoge aquellos anuncios que, “gracias a grandes presupuestos en marketing y comunicación, maquillan la imagen de las corporaciones mostrándose comprometidas con la ecología y la sociedad”. El anuncio “argumenta dudosas ventajas económicas para la ciudadanía y justifica su proyecto exploratorio de prospecciones petrolíferas en las aguas de Canarias”. El anuncio intenta vender las problemáticas prospecciones con frases como: “incrementar la riqueza de la población española un 46%, como en Noruega” o “manteniendo el interés turístico en sus maravillosas playas, como en el Caribe, Brasil o Italia, lugares con explotaciones petrolíferas”. Pero no dicen nada de la posibilidad de que 5,85% de los eventuales vertidos llegaran a Canarias, y el 26,6% a Marruecos, según una Declaración de Impacto Ambiental favorable a Repsol.

Cenutrio

PokerStars, y su anuncio protagonizado por Rafa Nadal, se alza favorito con un 14.49% de los votos en la categoría “Cenutrio”, que premia aquellos spots que fomenten “los valores más nefastos para el desarrollo de lo colectivo, lo ético, lo sostenible, lo solidario…”. Según el catedrático de Psicología Clínica especializado en ludopatía Enrique Echeburúa “la publicidad está en todas partes y expone a personas que en otras circunstancias no tendrían conocimiento de ese tipo de juego, especialmente si la protagonizan personajes como Rafa Nadal, que tiene la imagen del chico perfecto”. Un grave problema si tenemos en cuenta que el juego online es la segunda causa de ludopatías, que afectan a un 3% de la población. No da muy buena imagen a los jóvenes que una figura mundial como Rafa Nadal protagonice una campaña titulada “Me gusta competir”, y a la gente en general, en tiempos de crisis, que pueden ver este tipo de juegos como una forma rápida de resolver problemas financieros.

Me lo llevo

“Te lo mereces y lo sabes”, de El Corte Inglés es finalista en “Me lo llevo” con un 13,76% de votos. Esta categoría, que ya ganó en 2012, premia la cultura del sobreconsumismo, el despilfarro y valores insostenibles para el planeta. El anuncio pone de manifiesto que no se compra para satisfacer necesidades, sino para obtener una recompensa o gratificación. “La pulsión de comprar se presenta claramente como un sucedáneo de la felicidad en un mundo de fantasía”. A su vez, sólo aparece un hombre, maduro y vestido, mientras que todas las mujeres que aparecen son jóvenes y están desnudándose. El mensaje desentona un poco bastante en un país con un 21% de la población por debajo del umbral de la pobreza y un 30% en riesgo de exclusión social, que según el eslogan, no se merecería comprar ropa de marca ni pisar El Corte Inglés.

Lavado Solidario

El finalista a “Lavado solidario” es el Banco Santander, con su campaña “Tienes la última palabra» y un 11,66% de votos. Esta categoría premia “aquellos anuncios que transmiten valores pretendidamente sociales y solidarios a pesar de que la actividad empresarial de sus anunciantes esté muy alejada de esos ideales”. La empresa afirma que “cuando millones de personas como tú habéis elegido el Santander es porque sabéis que aquí los clientes sois lo primero”, mientras que, sin embargo, vendió Participaciones Preferentes, con la consiguiente multa de la CNMV de un millón de euros por no informar debidamente. Tampoco tiene razón el cliente si lo que pide es la paralización de un desahucio, como pone de manifiesto la PAH, que asegura que se “ningunea” a este tipo de clientes. Por último, un informe de SETEM y SOMO establece vínculos entre el banco y presas hidroeléctricas en la Amazonía, oleoductos en mal estado en México, megaproyectos de energía nuclear o monocultivos que atentan contra la soberanía alimentaria en Latinoamérica. A su vez, es el banco español que más créditos otorga a empresas de armamento, según la ODG y SETEM, y es la empresa que más sucursales cierra, con 500 al año.

A toda una trayectoria

Knorr y Unilever se hacen finalistas de “A toda una trayectoria”, con un 10,95% de los votos, que “pretende reconocer la labor publicitaria que promueve, año tras año, un modelo insostenible ecológicamente e injusto socialmente”. En sus anuncios “nos muestran que los ingredientes que emplean en la elaboración de sus productos se cultivan de una forma poco agresiva con el medioambiente, cuando, por el contrario, las distintas marcas alimentarias de este grupo destacan por promover un modelo de alimentación globalizado y deslocalizado, basado en una agricultura industrializada y en ningún caso sostenible”. Pero bien es cierto que su “Programa de Agricultura Sostenible” es más que ambiguo, que diversos productos están en la “lista roja” de transgénicos de Greenpeace, utiliza gran número de aditivos e incluye etiquetado engañoso denunciado por la OCU. El grupo es una de las grandes transnacionales del planeta en alimentación y cosmética, ellos mismo aseguran que “2.000 millones de veces al día en algún lugar del mundo, alguien utiliza productos” de alguna de sus marcas.

Florero

El Ford Ecosport de Ford se hace finalista en la categoría “Florero”, con un 8,83% de los votos totales, la cual recoge aquellos anuncios que “utilizan tanto a mujeres como hombres como reclamos sexuales con el objeto de hacer más deseable el producto publicitado”, anuncios sexistas. “El lema que utiliza es “sin llaves” y para representarlo el protagonista del anuncio abre el coche directamente, sin necesidad de introducir una llave, colocando sus genitales a la altura de la cerradura del vehículo, provocando la admiración de todos los presentes”, como se aprecia perfectamente en el vídeo. Según los expertos, el anuncio está destinado a un público mayoritariamente femenino ya que “cada vez más mujeres se inclinan por todoterrenos para uso urbano”, según Faconauto. A su vez, “no apuestan por un modelo de transporte sostenible como pretenden mostrar en este anuncio publicitario, sino todo lo contrario. El coche es necesario para acceder a una playa paradisiaca”, y el reclamo es siempre sexual.

Tortilla de Silicona

Litoral y Nestlé son finalistas de “Tortilla de Silicona”, con un 3,89% del total. Esta categoría destaca “aquellas campañas publicitarias que promueven una alimentación poco sana y con efectos negativos en la sostenibilidad del planeta y el justo reparto de los recursos alimentarios”. “El anuncio de Litoral, de hecho, asocia la comida popular y familiar con un espacio de encuentro social “muy nuestro”, frente a “los platos de fuera que han invadido nuestras cocinas”. Así, el hilo conductor terminan siendo los valores tradicionales de la comida, a pesar de que detrás de Litoral está, nada más y nada menos, que la gran multinacional de la alimentación Nestlé”. “La iconografía de lo rural como un jardín frondoso y a veces semisalvaje, mantiene la idea romántica de que en la base del modelo de producción de grandes multinacionales como Nestlé todavía está el campo”, cuando no es así ni de lejos. Ya no existe conexión natural con la producción dentro del sistema neoliberal.

Ombligo del Mundo

El finalista a “Ombligo del Mundo” es Toyota con “Reenamórate de la conducción”, con un 2,12% de los votos, por “los anuncios más despectivos, prejuiciosos y xenófobos con otros pueblos diferentes al nuestro”. “La calle más caótica del mundo es para ellos una de Bombay en la que conviven toda clase de sistemas de transporte: personas arrastrando todo tipo de artilugios, bicicletas, motos, coches del siglo pasado o antepasado, furgonetas, coloridos autobuses… y hasta un elefante, y entre todos ellos un impoluto coche blanco de la marca Toyota” en el que se entretiene un occidental, ajeno a todo. El mensaje es claro “no importa lo que suceda alrededor, disfruta de tus privilegios” y como es “un coche supuestamente más ecológico en su conducción, no tienes por qué preocuparte, ya que estás ayudando al planeta”. Por otro lado, la campaña incluye un concurso en redes sociales para viajar a la India, destino que se ofrece como el peor del mundo para conducir. Un premio para dos personas, cuyas bases están registradas ante notario, pero cuyo anexo no existe, por lo que varias organizaciones lo han denunciado por publicidad engañosa.

Felipe Serrano

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