La instalación de placas solares se triplica en el último año en Granada
Las empresas perciben que el ritmo se está frenando en este 2023 por la inflación y la subida de los tipos de interés
En los tejados de urbanizaciones granadinas como Los Altos de La Zubia ya se ven más placas solares que tejas, una gráfica imagen que resume hasta qué punto están creciendo estas instalaciones que permiten ahorrar entre el 30% y el 60% del consumo eléctrico en las viviendas. La escalada del precio de la luz que empujó a negocios y familias a buscar soluciones para rebajar la factura y el impulso de las administraciones a través de líneas de ayudas hizo que el pasado 2022 marcara un auténtico hito en la instalación de placas solares, que se triplicaron en la provincia.
Según los datos de la consejería de Política Industrial y Energía del Gobierno andaluz, Granada tiene ya más de 11.000 instalaciones de autoconsumo fotovoltaico de menos de 100 kW (para hogares y pequeños negocios). Una cifra que convierte a Granada en la tercera provincia, tras Sevilla y Málaga, con mayor número de instalaciones y potencia fotovoltaica en autoconsumo.
La evolución en la provincia de Granada ha corrido paralela a la regional, con un gran despegue de estas instalaciones raíz de la entrada en vigor de la nueva normativa del año 2020, que reguló las condiciones del autoconsumo incorporando la posibilidad de que se compensaran los excedentes de las plantas de autoconsumo eléctrico.
Así, mientras que 2019 la consejería legalizó 115 instalaciones de autoconsumo fotovoltaico, en 2020 se pusieron en marcha 1.006 plantas y en 2021, el ritmo se dobló, con un total de 2.380 nuevas instalaciones.
7.935 La cifra Nuevas instalaciones de autoconsumo fotovoltaico se colocaron en Granada en 2022, el triple que el año anterior
Pero el año récord para el desarrollo de esta tecnología fue el pasado 2022, en el que Granada sumó 7.935 nuevas plantas de autoconsumo, triplicando a las del año anterior. O lo que es lo mismo, las placas en los tejados crecieron a un ritmo de 22 nuevas instalaciones al día. «Esto ha sido posible gracias al propio sector y al impulso que el Gobierno andaluz está llevando a cabo para contribuir al desarrollo del autoconsumo desde diferentes ámbitos, entre los que se encuentran las ayudas a la financiación de este tipo de instalaciones o la simplificación administrativa», señalan desde la consejería.
Los incentivos que gestiona la Junta y se financian con fondos europeos Next Generation, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y gestionados por las comunidades autónomas, han repartido 20 millones de euros en la provincia. Más de 3.000 granadinos han solicitado estas subvenciones para instalar equipos de autoconsumo de energías renovables con una inversión total de 70,4 millones de euros.
La demanda de las ayudas, que se tramitan por parte de las propias empresas instaladoras y se otorgan en orden de solicitud, sin tener en cuenta otros criterios como la renta, ha sido tan alta en toda Andalucía que pese a las sucesivas ampliaciones de presupuesto la mayoría de las líneas están agotadas en estos momentos. No obstante, la ventanilla virtual sigue abierta y los solicitantes entran en una lista de espera.
Como el aire acondicionado
Las instalaciones, que se amortizan en un plazo de entre cuatro y siete años mientras tienen una vida útil de 25 años, son rentables por sí solas, por lo que cada vez más granadinos las compran sin ayudas, según perciben en el sector. «Ha habido tal avalancha de solicitudes que no son dinámicas», valora el presidente de la Asociación de Instaladores eléctricos de Granada, Juan Manuel Plata.
El empresario, que dirige Montajes Eléctricos Hermanos Plata de Ogíjares, subraya que el sector tiene por delante muchos años de crecimiento y superará los objetivos de autoconsumo fijados en la hoja de ruta del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico mucho antes de la fecha marcada, por lo que cree que es necesario marcar nuevas metas.
Eso sí, lo que perciben los profesionales en este primer trimestre es un freno en el ritmo de crecimiento, que el pasado año fue absolutamente frenético, hasta el punto de que las empresas no daban abasto para dar presupuestos. La menor capacidad de consumo en un contexto de inflación y el encarecimiento de la financiación por la subida de los tipos de interés está haciendo que la gente se esté pensando más la inversión inicial, en opinión del empresario Rafael Molino, de Solar Europe. Un freno que ni siquiera ven negativo, ya que les permite seguir creciendo de forma ordenada.
«El año pasado en Solar Europe triplicamos la cifra de negocio y este año la doblaremos», vaticina. «El sector va a mantener un ritmo de crecimiento positivo que durará muchos años. Las placas solares han venido para quedarse, habrá ejercicios en los que se monten más o menos, pero esto será como el aire acondicionado, todos los hogares acabarán teniéndolas», concluye.
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