Las cinco grandes torres de Granada que no se levantaron
La proyección de grandes edificaciones hubiese cambiado por completo el ‘skyline’ ( horizonte) de la ciudad de la Alhambra
Granada no destaca por la altura de sus edificios. En el ‘skyline’ de la ciudad no se aprecian rascacielos ni grandes construcciones contemporáneas. El edificio más alto ronda los 70 metros. Se trata de la torre Atalaya, situada en el barrio de San Lázaro. Le sigue la torre de la Catedral, que pudo ser incluso más alta y de forma duplicada.
No hay que olvidar que Granada es una ciudad sísmica, lo que hace que tampoco proliferen los edificios de muchas plantas. La normativa municipal tampoco ayuda. Ya se topó con la ley Álvaro Siza con el edificio Zaida en Puerta Real o Carlos Quintanilla con las Torres Neptuno. Pero, hay otros muchos proyectos que no vieron las luz y quedaron sobre el papel.
La gran torre de Forum
La zona en la que se encuentra el edificio Forum iba a ser una gran zona de expansión residencial y empresarial. La idea quedó solo en la construcción de viviendas. Junto a la única edificación que acoge empresas a día de hoy, se planteó elevar una torre de 25 plantas y casi 100 metros de altura. Con base rectangular, el proyecto se concebía como «un prisma de vidrio envuelto en una celosía cerámica que resuelve los aspectos de comportamiento y eficiencia energética. Además, se le confiere un aspecto singular y cambiante en función de las condiciones del sol», resaltan desde el estudio de arquitectura Jiménez-Brasa, autores del proyecto.
El destino de esta edificación, en el que la luz natural era la protagonista y pretendía marcar el límite entre la ciudad económica y la Vega de Granada, era el de albergar oficinas y un hotel. Un proyecto que quedó en un cajón. Ahora, una cadena internacional pretende construir un hotel junto al edificio Forum Granada, este de menor envergadura.
La torre del Serrallo Plaza
El Serrallo Plaza cuenta con una torreta en la que están anclados los logotipos de ciertas marcas que se instalan en este centro comercial. Pero, en realidad es una estructura que debía tener otro uso. El proyecto inicial contaba con una gigantesca torre que remataba todo el conjunto. El arquitecto Carlos Quintanilla y el estudio británico Chapman &Taylor proyectaron esta mole de 19 plantas completamente acristalada. Aparcamientos, locales y dos ascensores exteriores remataban el conjunto. Estaba destinada a espacios de oficinas, pero el alto precio del alquiler de las mismas, así como la coyuntura económica del momento, hicieron el proyecto poco viable. Tampoco ayudo la negativa vecinal, en contra al entender que rompía la armonía de la zona.
La torre de Caja Rural de Granada
En 2004, Caja Rural de Granada hizo pública su intención de construir una nueva sede central en la ciudad. La Caja ya contaba con dos oficinas icónicas en Granada, por un lado la de Gran Vía-Reyes Católicos, obra de Ángel Casas y copia de un edificio parisino y, por otro, la del edificio de cristal ubicado frente al Parque de las Ciencias, obra del estudio Jiménez-Brasa – el mismo que proyectó la torre de Forum-. Del proyecto solo se conocer el boceto de una torre de 20 plantas, con 19.000 metros cuadrados y capacidad para unos 1.000 trabajadores. En febrero de 2005 esta propuesta aparece en la revista Alzada, del Colegio de Arquitectos y Aparejadores de Granada, donde se pudo ver una recreación realizada por un estudio motrileño. En el mismo artículo se dice que Norman Foster se haría cargo del proyecto, con un presupuesto de unos 48 millones y que estaría ubicado en terrenos cercanos al Cerrillo de Maracena. La dificultad para vender sedes en propiedad, la llegada de la crisis y el cambio de administradores acabó con todo el proyecto.
La ‘Casa del Agua’
En 2009, la zona Norte de Granada iba a contar con el edificio más vanguardista y llamativo de la ciudad. Se trataba del denominado ‘Domus Aquae’, que traducido del latín al español significa la ‘Casa del Agua’. Nombre con el que se bautizó a la que iba a ser nueva sede de Emasagra, la compañía de servicios públicos de agua en Granada.
No iba a ser el más alto de los proyectados en la ciudad, ya que contaba con 10 plantas de altura, pero sí uno de los más pintorescos. El edificio, diseñado por el arquitecto granadino Gonzalo Arias, con un sistema de rigidización con pantallas antisísmicas y cubierto por cristaleras 360º, que ofrecían una vista privilegiada de la ciudad y Sierra Nevada desde sus oficinas.
Su construcción estaba supeditada a la venta de la actual sede de Emasagra, ubicada en el barrio del Realejo, por lo que nunca se llegó a iniciar este proyecto que se ubicaba a la altura del actual parque de bomberos de la zona Norte de Granada.
La Catedral de Granada puede ser el precedente de todos estos proyectos contemporáneos. No se puede meter en la ‘Granada no construida’ ya que se trata de un templo de primer orden, pero sí modificado de la idea original. Uno de los bocetos de construcción del templo que ha llegado hasta nuestros días es el que Lázaro de Velasco presentó a concurso en el año 1577.
Se puede afirmar que en el dibujo había dos torres gemelas que flanqueaban la portada, proyecto original del maestro Diego de Siloé. Dos cuerpos que no acababan mochados, se levantaban varios pisos más cambiando la planta a una forma octogonal. Una forma parecida a la torre que hoy tiene la Catedral de Toledo.
Desmochada la torre por problemas de asentamiento, sólo podemos tomar como fiable el dibujo de Ambrosio de Vico en su Plataforma de Granada, aunque en la torre, que ya hacía 23 años que estaba desmontada, no aparece ningún cuerpo octogonal.
Otra de las obras no construidas que hubiese cambiado el ‘skyline’ de la ciudad.
Pepe Moreno y Javier Contreras Granada y Universidad de Granada
https://www.ideal.es/granada/cinco-grandes-torres-granada-levantaron-20230517002402-nt.html