«EL COLEGIO DE SIERRA ELVIRA INAUGURADO EN 1923» por José Enrique Granados
En nuestra gacetilla publicada el 27 de agosto de 2019, nos hicimos eco del centro educativo existente en Sierra Elvira prometiendo que indagaríamos más sobre él.
Pues bien, nos hemos encontrado con esta noticia publicada el 14 de abril de 1923 en El Defensor de Granada, informando sobre la solemne inauguración de una escuela en Sierra Elvira.
“Ayer tarde asistimos con gran regocijo al solemne y consolador espectáculo de la inauguración y bendición de los locales de una escuela nacional, creada bajo los auspicios cariñosos de nuestro diputado, el ilustrísimo señor Director general de enseñanza, don Pascual Nácher y Vilar, que haciendo honor al pueblo de Atarfe, capitalidad municipal de la barriada de Sierra Elvira, no ha omitido gestión ni esfuerzo alguno para que tuviera realidad lo que era un noble anhelo de aquel respetable y celoso municipio.
De todos es sabido que el señor Nácher viene realizando una verdadera cruzada en favor de la enseñanza en general, y más particularmente en favor de su querida Granada. Buena prueba de ello es la creación de las muchas escuelas que ha llevado a efecto en los apures del presupuesto finiquitado y más que se propone crear, aprovechando el flamante que ya está en vigor y que lleva millón y media de pesetas para este fin.
El pueblo de Atarfe, dio ayer, como apuntamos en principio, una nota más de lo que puede y piensa un pueblo que quiere vivir incorporado al progreso de los tiempos; por eso, en la solemnidad señalada, hubo cariño, entusiasmo y recíprocas felicitaciones. Después del ritual de bendición de locales, que hizo con la mayor solemnidad el celoso párroco, don Ernesto Hernández García asistido del señor coadjutor don Joaquín Fresneda, hizo aquel un primoroso discurso lleno de amorosos presentimientos en favor del fruto que había de dar la bendita institución popular, cuya Inauguración tenía rebosante de júbilo a los congregados.
Define con insuperable preciación los conceptos ilustración, instrucción, cultura y educación, para venir a deducir que es función primordial del Maestro y de la Escuela, la educación. Pero no esa educación basada en los principios de universalidad, sino en los sólidos y fecundos de la moral cristiana que predica y enseña la Iglesia católica. Y termina haciendo votos por la prosperidad de aquellos ideales que han tenido manifestación propicia en el favor que el ilustre Director general ha procurado para este vecindario que le bendice y aclama.
Después hizo uso de la palabra el joven y discretísimo Inspector-jefe de 1.a enseñanza actual, don Fernando Sáinz Ruiz, el que comienza agradeciendo al municipio de Atarfe la amable invitación que se le hizo para que concurriese al acto que se celebraba, con gran complacencia de todos. Dice que sus primeras palabras son de alabanza justificadas para todos aquellos que han contribuido al logro de aquella creación escolar, muy singularmente para el hombre enamorado de estas cuestiones que hoy rige los destinos de la pública enseñanza desde la Dirección general, al que celebra no ya por razón de obligado reconocimiento en el orden jerárquico, sino porque le conste que es hombre merecedor de todo encomio por su afanar en provecho y mejoramiento espiritual del país. Canta un himno a la hidalguía y nobleza del pueblo español, al que no supera en ello, pueblo alguno extranjero. Ahora bien, reconoce que España vive atrasada, porque en el orden de prelación de sus problemas grandes, no puso siempre en primer término el de la cultura, a semejanza de otros, que, por ello, nos llevan de anticipación en el camino a recorrer, más de un siglo de delantera. Sin embargo, tiene gran fe en el porvenir y pronto nos incorporaremos. El discurso del señor Sáinz fue de tonos patrióticos y de gran elevación de pensamiento.
Últimamente habló en nombre de los obreros Bernardino Esquinas, quien ante nosotros se reveló como hombre de gran mesura y discreción al hacer suyas las manifestaciones que hicieron los señores que le habían precedido en el uso de la palabra. Pidió a todos su cooperación para que no se malogre la buena obra que se inauguraba merced al apoyo eficaz que habían encontrado en el señor Nácher, acaso y sin duda, reconociendo el orador que la obra de la educación es muy compleja y que en ella intervienen varios factores, pues nunca puede esta encomendarse solo al maestro, si no se ve asistido del esfuerzo y coadyuvancia de los demás.
Y finalmente, para completar esta ligera reseña, diremos que asistió al acto el Ayuntamiento casi en pleno, bajo la presidencia de su joven y simpático alcalde don Francisco Osuna Sánchez, el personal del Juzgado, muchos profesores y maestras del Municipio y pueblos comarcanos varios señores de Granada amigos del maestro nombrado para Sierra Elvira don Juan Ubera Ibáñez, a quien todos felicitaron.
Por último, en el comedor del restaurante de los Baños fuimos todos obsequiados espléndidamente con dulces, pastas, licores y habanos que ofreció el Ayuntamiento de Atarfe a los invitados. Como nota final, diremos que se dieron ¡vivas! al señor Nácher, al Ayuntamiento y al vecindario de la barriada, acordándose telegrafiar al señor Director general reiterándole el testimonio de la gratitud y adhesión más leal de este pueblo noble y generoso.”
En la lectura del artículo aparece el nombre de Bernardino Esquinas, al que también le dedicamos una entrada hace unos meses.
Fotografía, ya usada anteriormente del Patronato Escolar, Nuestra Señora del Carmen.
Gacetilla y curiosidades elvirenses.
