¿Por qué faltan enfermeras en España?
El resumen semanal de informaciones sanitarias o relacionadas con la salud por el experto en Salud Pública Joan Carles March, en una sección imprescindible por su relevancia y calidad. Para estar al día en cuestión de salud. No te lo pierdas.
España tiene un déficit histórico de estas profesionales en la sanidad –hay 6,57 por cada 1.000 habitantes frente a las 8,3 de media en Europa, según datos de la OCDE– y un estudio, titulado Escasez de enfermeras en España: del caso global a la situación particular e incluido en el último informe de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS), se pregunta por qué sigue pasando.
La investigación acredita con datos que el problema ya no es la migración a otros países donde les pagan mejor o tienen más posibilidades de desarrollar su carrera profesional ni tampoco que no haya personas interesadas en estudiar la carrera. Así que, concluye el estudio liderado por Paola Galbany, la situación solo puede explicarse por el hecho de que abandonan la profesión.
Cada profesional contratada en 2022 firmó de media 2,76 contratos en el mismo año, revela el estudio, que muestra cómo la inestabilidad persiste pese a la reforma para atajar la temporalidad.
El 80% de los contratos de enfermería firmados en 2023 eran temporales. El porcentaje ha mejorado 15 puntos desde la reforma de 2022, pero sigue siendo muy elevado. El número medio de contratos mensuales, otro medidor de la temporalidad, ha registrado también una buena evolución: de los 3.592 que se firmaban en 2021 a los 2.559 de 2022.
Existen pocos estudios que hayan analizado el abandono de la profesión. En este caso se ha hecho una aproximación al problema midiendo cuántas enfermeras no colocan como primera opción la profesión durante la búsqueda de empleo. El estallido de la pandemia redujo significativamente este indicador y la evolución ha continuado hasta 2023 cuando se ve un pequeño repunte. “Cualitativamente es difícil seguir la pista de dónde van. A menudo se dedican a otra cosa como sectores más comerciales o incluso otras profesiones. Otras el abandono es cíclico, es decir, lo dejan unos años y después se reincorporan”, anota Galbany.
Más de 2.100 enfermeras y enfermeros se marcharon a trabajar a Reino Unido en 2013. Ese año se produjo el pico de migraciones a este territorio que ahora no registra la llegada de profesionales desde España. Noruega se ha colocado en los últimos años como el mayor receptor de enfermeras que estudiaron en España, pero el volumen es mucho menor. Los datos muestran el frenazo a la exportación de profesionales: 2.792 sanitarias y sanitarios hicieron el trámite para reconocer sus estudios en otro país en 2013 frente a las 513 de 2021.
El estudio calcula que se necesitarían 41.000 sanitarias para que España estuviera a la altura de un país vecino como Portugal
La salida de profesionales de enfermería entre 2008 y 2016 –a partir de ese momento el número empieza a descender– dejó herido de muerte un sistema que tenía ya déficit de profesionales. El estudio calcula que se necesitarían 41.000 sanitarias para que España estuviera a la altura de un país vecino como Portugal. Solo hay seis países europeos con menos tasa de personal que nuestro país: Eslovaquia, Italia, Hungría, Bulgaria, Grecia y Letonia, según un informe del Colegio General de Enfermería publicado en 2022. En el escenario también impacta la necesidad cada vez mayor de cuidados de una sociedad envejecida y las jubilaciones por venir de las plantillas.
Más que los salarios, lo difícil es la temporalidad. Vivir pensando que el contrato se va a acabar la semana que viene y que no sabes nada de Recursos Humanos. Creo que la profesión necesita como pilar contratos más seguros. Todos los testimonios coinciden en la “inseguridad” que genera en el trabajo diario estar en puestos muy diferentes en poco tiempo. “Empiezas en cardiología y cuando ya comprendes de qué va, manejas y te sientes parte del equipo, te toca otra cosa”.
La solución, resume la investigación de SESPAS, “hay que buscarla en la mejora de las condiciones laborales y profesionales, ya que todo apunta a que provocan el abandono de la profesión y los episodios migratorios internacionales”.
UNA SECCIÓN de JOAN CARLES MARCH
Sofía Pérez Mendoza
FOTO:Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC)
https://www.elindependientedegranada.es/ciudadania/xxxvii-cronicas-sanitarias-falta-enfermeras-dolor-soledad-ejercicio-fisico-inclusion