«PANADERÍA SANTA ANA O TAMBIÉN PANADERÍA BIENVENIDO» Por ARMANDO DíAZ JIMÉNEZ
Fundada en la década de los 40 por Bienvenido Jiménez Verdejo. Tres generaciones
mas han continuado con la capacidad creadora y la espléndida tarea de la
elaboración del pan.
Hoy ya sabemos que el pan contiene sales minerales fibras y vitaminas elementos que ayudan a definirlo como un poderoso factor de equilibrio nutricional.
En nuestra panadería conservamos las técnicas aprendidas hace bastantes años no en vano el arte del pan va pasando de generación en generación enriqueciéndose con las aportaciones de los maestros del pan.
En la década de los 40 el pan se elaboraba de una forma totalmente artesanal el amasado, la fermentación y la cocción, tenia unos parmetros diferentes a los de hoy. No existían las levaduras y la fermentación constituía una de las labores mas largas dentro de la fabricación del pan.
El amasado se realizaba con las manos consiguiendo la textura de la masa basándose en golpes sobre la propia artesa; el pan se cocía en hornos denominados morunos donde la leña se introducía dentro del propio horno, cuando el fuego perdía fuerza se limpiaba la ceniza, se arrinconaban las ascuas y se realizaba la cocción.
Este pan es ese que los mayores nos cuentan de sabor exquisito y de larga duración. En estos tiempos el amasado, la fermentación y la cocción han cambiado para abaratar el precio del pan. Como a otros sectores de la industria ha sido requisito primordial la mecanización, con ella la producción es más cuantiosa. Hoy en día puede encontrar pan en cualquier rincón de Granada.
El pan que en un tiempo fue el mejor producto base para la alimentación pasa por un periodo de relegación, es retirado en las dietas de adelgazamiento como si fuese el único culpable de la moda de la delgadez y los precios tan baratos de este genero están contribuyendo a la degradación del pan.
El pan barato trae consigo una precipitación acelerada de la producción que va en detrimento de la calidad. Ya el consumidor esta asumiendo que el pan es un producto que tiene un valor nutricional
muy importante en la dieta mediterránea y que este va aparejado a la buena y correcta elaboración.
Espero y deseo que lo que en nuestro caso son tres generaciones de panaderos sigamos realizando junto con otras muchas panaderías, buen pan para disfrute bienestar y salud de todos los ciudadanos.
También ya que tengo la oportunidad de escribir en este periódico quiero significar la labor de tantos panaderos de Atarfe empezando por mi abuelo Bienvenido y terminando con Juan de Dios Trujillo encarnado en sus nombres la profesionalidad de tantos otros que han conseguido que un trabajo tan especialmente duro pase de generación en generación, dejándonos su buen hacer, su experiencia
y la dignificación del panadero
PUBLICADO EN EL MIRADOR DE ATARFE EN PAPEL EN MARZO DE 2021 AÑO 1-NÚMERO 2