Diputación crea un servicio pionero para recoger la basura de todos los municipios que lo deseen

e trata de una nueva prestación que abaratará los costes a los pueblos y liberará de trámites administrativos a los ayuntamientos
La Diputación creará un servicio provincial de recogida de basura que abarate los costes y facilite la vida a los ayuntamientos. Será una prestación pionera, ya que es la primera vez que se lleva a cabo en el ámbito de la provincia.
Los municipios que deseen sumarse a este nuevo servicio provincial tienen hasta septiembre para realizar su solicitud. Si no es buen momento, también pueden hacer su petición a futuro. Con todos estos datos, la Diputación prepara un pliego y buscará la empresa que quiera realizar la recogida de residuos en los pueblos de las diferentes comarcas. Desde la Alpujarra a la Costa pasando por el Área Metropolitana, municipios de más y menos de 20.000 habitantes tendrán la opción de apuntarse a este sistema provincializado.
El diputado de Medio Ambiente, Antonio Mancilla, asegura que esta propuesta ha tenido muy buena acogida y que los municipios quieren sumarse a este grupo de recogida comunitaria.
Hasta ahora los ayuntamientos tienen diferentes sistemas para vaciar los contenedores: gestión directa –es decir, con trabajadores municipales; mixta, con mancomunidad o directamente con una empresa privada. Según su situación, los consistorios decidirán si es buen momento para dar el salto al servicio provincial y qué opción toman sus trabajadores a la hora de ser subrogados por la empresa que llegue o seguir trabajando para la administración pública.
Cada uno estudiará cómo son sus calles, sus gastos y sus circunstancias a la hora de sacar y recoger la basura. Serán los plenos de los ayuntamientos los que decidan qué hacer con el futuro de sus residuos.
La Diputación ya ha dado el primer paso pues ha aprobado en pleno la ordenanza para la recogida de los residuos en los diferentes municipios. Después, cuando se reúnan las propuestas, se pasará por junta de gobierno el modelo de gestión y se realizará la propuesta económica mientras se tantea a las empresas para sacar el pliego y licitar este servicio. Si los plazos se cumplen, en un año podría estar funcionando.
El diputado de Medio Ambiente explica que a todos los pueblos les costará lo mismo el servicio. Serán 120 euros por tonelada de contenedor orgánico y de restos y que los de reciclaje no tendrán coste porque se gestionarán mediante convenios con empresas especializadas.
Servicio más moderno
«Además todos los municipios tendrán contenedor marrón, algo que solo funciona ahora en cinco pueblos de la provincia. El servicio ofrece grandes ventajas. Se realizará una inversión inicial en contenedores y vehículos que modernizará la recogida en la provincia», aporta Antonio Mancilla. La prestación también contempla la recogida puerta a puerta ya que se adaptará a las calles y peculiaridades de las diferentes localidades.
Según apunta Mancilla será «más barato» y además «librará de quebraderos de cabeza a los alcaldes». Actualmente, los ayuntamientos tienen dificultades para realizar inversiones en este tipo de servicios y además conlleva muchos trámites administrativos el gestionar el personal o buscar empresa para que recoja los residuos.
El diputado de Medio Ambiente señala que será la Diputación la que cobre el recibo directamente a los vecinos y así no tendrá problemas de demoras o impagos con los ayuntamientos. Al ser responsables de manera directa de los ciudadanos también se encargarán de las sanciones. «En los contenedores de basura selectiva habrá más frecuencia de recogida algo que se notará en las calles de los municipios», añade Antonio Mancilla.
La coordinación se realizará mediante la delegación competencial de los ayuntamientos que así lo acuerden a la Diputación, e incluirá, no solo la prestación material del servicio, sino las facultades de regulación, ordenación, gestión, sancionadoras, así como las tributarias o tarifarias.
Todos los municipios podrán delegar esta competencia y será la Diputación la que establezca la tasa específica, diferenciada y no deficitaria, que refleje el coste real, directo o indirecto, de las operaciones de recogida y transporte de residuos municipales. La idea es que este servicio tenga los gastos y los ingresos ajustados y no se generen problemas.
Para la confección de la ordenanza fiscal se atenderá al estudio económico, que, en todo caso, deberá garantizar la cobertura total del coste del servicio, tanto en el momento actual como en los ejercicios sucesivos.
FOTO: Visita a la planta de tratamiento de residuos de Alhendín. Ideal