«¿Qué es la violencia vicaria y qué contempla el anteproyecto de Ley»

El Gobierno impulsa nuevas medidas ante una realidad que le ha arrebatado la vida a 65 menores desde 2013, tres en este último año

La violencia vicaria es una forma de violencia machista, probablemente la más cruel. Los hijos e hijas de las mujeres víctimas de violencia de género, así como las niñas y niños menores de edad sujetos a su tutela, guarda y custodia, son víctimas directas de este tipo de violencia. Además, en ocasiones estos y estas menores de edad son utilizados por el maltratador para hacer daño a la madre.

¿Cuándo deben saltar las alarmas? La violencia vicaria se produce cuando el progenitor utiliza a los hijas e hijos para hacer daño; amenaza con quitártelos; con matarlos o te dice que te dará dónde más te duele; interrumpe los tratamientos médicos de tus hijos e hijas cuando están con él; utiliza los momentos de la recogida y retorno del régimen de visitas para insultar, amenazar o humillar a la madre; o cuando habla mal de ella y su familia en presencia de ellos y ellas. Ante estas situaciones, la experiencia de los profesionales coincide, hay que pedir ayuda.

En España, desde 2013 a 2025 se han asesinado a 65 menores por violencia vicaria, tres en este último año, según datos oficiales. Junto a ellos, el número de mujeres asesinadas asciende a 38 en 2025 y a 1.333 desde 2003. A todas ellas, y los menores, se les recuerda cada 25-N, Día Internacional Contra la Violencia de Género, para dejar claro que hay que seguir luchando, que el sistema debe avanzar y que el único motivo por el que perdieron la vida tiene un nombre, machismo.

Nueva ley

El Consejo de Ministros ha abordado el anteproyecto de ley orgánica de medidas en materia de violencia vicaria. Los objetivos de la futura ley son tres: cumplir el renovado Pacto de Estado contra la Violencia de Género en el ámbito de la violencia vicaria; definirla e incorporarla al ordenamiento jurídico y, sobre todo, proteger a las víctimas y concienciar a la sociedad contra estas violencias tan radicales. El texto modifica otras leyes que afectan a la violencia vicaria, fundamentalmente la Ley Integral contra la Violencia de Género, de la que se ha celebrado recientemente el vigésimo aniversario, pero también el Código Penal, el Código Civil y las leyes sobre el enjuiciamiento civil, el Poder Judicial y la protección jurídica del menor.

El anteproyecto identifica la violencia vicaria como aquella que se ejerce sobre la mujer por parte de su pareja o expareja a través de una persona interpuesta con el fin de vulnerar su integridad moral. Esas personas interpuestas pueden ser los menores, los descendientes, los mayores con discapacidad sometidos a la patria potestad o custodia, los ascendientes, los hermanos o la pareja actual de la víctima.

Con la reforma, esta violencia queda tipificada con un nuevo artículo en el Código Penal que establece dos tipos, siguiendo la jurisprudencia del Tribunal Constitucional: uno general de violencia vicaria en el ámbito de la violencia doméstica, con penas privativas de libertad de seis meses y un día a tres años, y un tipo agravado en el contexto de la violencia de género, con penas de un año y medio a tres años. Además, se incorpora como pena accesoria la prohibición de portar armas entre tres y cinco años.

Violencia institucional

No hay que olvidar que la violencia encuentra, en ocasiones, un aliado, el sistema que ha fallado a cientos de mujeres a lo largo de estas décadas. Es por ello que las propias fuentes oficiales reconocen la violencia institucional a través de la publicación ‘Violencia institucional contra las madres y la infancia. Aplicación del falso síndrome de alienación parental en España’. Aquí se analiza algo esencial que han sufrido muchas mujeres y que se abordó durante el encuentro feminista en la capital, el falso síndrome de alienación parental y la violencia que sufren las mujeres que, en su condición de madres, han tratado de proteger a sus hijas e hijos, en el contexto de procesos judiciales por violencia machista y, en concreto, por violencia de género y/o violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes.

Se trata de la acusación que señala que uno de los progenitores está influyendo sobre el menor para mantenerle lejos del otro; en la mayoría de los casos, se mira como manipuladoras a las madres. La publicación recoge que es en sí mismo una muestra de la presencia y los usos sociojurídicos de dichos estereotipos de género e interseccionales en los sistemas judiciales; de hecho, opera como aglutinador de estereotipos sobre las mujeres, las maternidades, los vínculos familiares, las paternidades, los cuidados, y las niñas, niños y adolescentes.

Manuela Millán

FOTO: Encuentro que se desarrolló en la Universidad Popular de Jaén. M. MILLÁN

https://www.ideal.es/jaen/jaen/violencia-vicaria-contempla-anteproyecto-ley-20251123224752-nt.html