El negro panorama de los jóvenes: salarios más bajos que hace 40 años
Un estudio refleja que los sueldos de antes de la pandemia eran peores que los de las crisis del 2008 y de los noventa
El salario real de los jóvenes en España es hasta un 50% menor que en 1980, según un estudio publicado por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), que pone el acento en el trabajo precario y los contratos temporales.
Por franjas de edad, los sueldos son un 26% más bajos entre los 30 y 34 años y hasta un 50% más bajos entre los 18 y 20 años. Dos tercios de los jóvenes españoles comienzan trabajando en precario. Las condiciones salariales previas a la pandemia eran peores que las de la recesión generada en 2008 por el estallido de la burbuja inmobiliaria, y estas crisis, a su vez, han sido aún más malas que la peseta en la década de los noventa.
Salarios menores que hace 40 años
En 2019, la tasa de paro juvenil en España fue del 29,8 % en el tramo de 20 a 24 años y del 19%, en el de 25 a 29. En 2007, en el primer tramo era del 15% y en el segundo, del 9%. Estos datos ponen de manifiesto que las crisis económicas causan un retroceso en el empleo juvenil español que “no llega a recuperarse del todo en la expansión subsiguiente”, de acuerdo con el informe elabotrado por Fedea.
La media del sueldo mensual de los trabajadores entre 18 y 35 años en 2019 era menor que hace 40 años, un 26% para los trabajadores entre 30 y 34 años y hasta un 50% para los de 18 a 20.
Temporalidad y salarios reducidos
El estudio, que analiza el empleo juvenil desde 1980 hasta 2019, apunta como factores muy negativos la alta tasa de temporalidad, la gran rotación en los trabajos y la salarios reducidos, además del crecimiento del empleo a tiempo parcial. Esto último es visible en la caída de los días de trabajo a tiempo completo, del 73% al 22%, “por la caída de la duración de los contratos y de la jornada laboral”.
El informe hace hincapié en que ningún Gobierno ha sido capaz de poner solución a este problema, lo mismo que con la deserción educativa, que continúa, a pesar de las reformas de leyes.