«El traslado de los Reyes Católicos se realizó como el del mismísimo Cristo»
Granada celebra el V centenario de la efeméride, un acontecimiento equiparable a grandes funerales de jefes de estado o líderes religiosos por la magnitud que tomó en 1521
Las crónicas que han llegado hasta nuestros días son muy pobres, pero por lo que podemos saber «se realizó como si fuese el mismísimo Cristo», comenta a IDEAL el profesor de historia moderna de la UGR y catedrático Miguel Luis López-Guadalupe.
La reina Isabel la Católica dejó claro en su testamento que quería ser enterrada en Granada de una forma discreta y en lo que ahora es el Parador de la Alhambra, pero en 1521 fue trasladada junto a su esposo a una Capilla Real que estuvo varios años en construcción, con el objetivo de acoger a los cuerpos de los monarcas.
Fue Carlos V el que fomentó el traslado de los féretros para ganarse al pueblo ‘español’, ya que no estaba muy bien visto por su visión europea, y engrandecer la figura de los Reyes Católicos en un endiosado panteón. El motivo era tan claro como que «los cuerpos eran tan venerados que podrían ser considerados reliquias. Se ordenó hacer el traslado igual que se desarrolla la procesión del Corpus. Estuvieron todos los representantes religiosos, civiles y militares. Podemos hablar de una sacralización de la figura de los reyes», afirma López-Guadalupe.
El viaje de los cuerpos fue coordinado por el Conde de Tendilla, junto con el corregidor de la ciudad, Don Antonio de la Cueva. Se hicieron tres paradas oficiales para la oración. La primera en la Cuesta de Gomérez, otra en Plaza Nueva y la última en Bib-Rambla. «Estos tres enclaves fueron decorados por franciscanos, dominicos y jerónimos, las tres órdenes favoritas de los Reyes Católicos«. Un recorrido en el que, por cierto, también se movió el cuerpo del príncipe Miguel, que murió con menos de dos años», subraya el profesor de historia moderna de la UGR.
Para la época, podemos imaginar la magnitud del acontecimiento al que toda la ciudad prestó la máxima atención. Según los documentos que han llegado a nuestros días, el recorrido se cubrió con toldos para dar sombra, las calles se barrieron ante el paso de la comitiva, y se prohibió el tránsito de caballos, «como si hoy en día cortan el tráfico. Además, había quien quería tocar los féretros, trasladados en un carro triunfal dorado» detalla Miguel Luis López-Guadalupe.
«Comparable con el funeral de Nelson Mandela»
Para que se pueda entender la magnitud de tal acto, este profesor de historia moderna de la UGR compara el despliegue con el del funeral de Nelson Mandela. Un acontecimiento también equiparable al de Juan Pablo II en 2005, al que asistieron 5 reyes, 6 reinas y 70 presidentes de gobiernos y 2 millones de fieles.
Una celebración de este V centenario que tiene partidarios y detractores pero que «permite reflexionar sobre la historia y mantener esta memorias. En Granada ya estamos acostumbrados al debate de todos los años con el Día de la Toma», sentencia López-Guadalupe.
https://www.ideal.es/granada/traslado-reyes-catolicos-20211110123633-nt.html
FOTO: Imagen de la tumbas de los Reyes Catóicos en la Capilla Reak /