PROFESORADO ATARFEÑO EN MEXICO (3 PARTE) por Juan de Dios Fernández
VISITA A LAS ESCUELAS Y VISITA A LOS CABOS; Escuela de preescolar “José Refugio Angulo” y
a la escuela de Primaria “Jerónimo Ahumada Armenta”
El pasado día 2 de Julio, lunes, había previstas dos visitas, a la escuela de preescolar de Preescolar “José Refugio Angulo” y a la escuela de Primaria “Jerónimo Ahumada Armenta”.
Tras el desayuno en el hotel, viene una camioneta de la Secretaría para recogernos y llevar a ambos centros.
En la Escuela de preescolar, que nos a compaña Marco, nos encontramos que están el acto de cierre del curso y graduación del alumnado de 5 años. En el patio del colegio, bajo techo cubierto, los niños y niñas de 5 años y sus familias. En el acto, una de las maestras iba narrando lo que se hacía, con textos alusivos a las experiencias vividas. Un grupo de niñas y niños de 4 años, con tambores y música de fondo hacen el acto de homenaje a la bandera, una actividad muy enraizada en los centros a raíz de la separación entre iglesia y estado, buscando el estado tener señas de identidad y cultivarlas en la población. Nos llama la atención, que en esta escuelita de un barrio marginal de La Paz, para entregar el diploma de graduación a alumnado de 5 años (un folio con sus nombre, escudos del estado y del colegio dentro de una funda de plástico), en la mesa de entrega de diplomas acompañaban a la directora, la responsable estatal de preescolar, un representante municipal y dos padres.
Tras el acto, comienza nuestra visita, presentaciones, nos pasan a un salón donde han preparado un cartel de bienvenida y en una mesa con las banderas de México y España hay viandas para la posterior comida. Recorremos el colegio, clases muy austeras, con suelo de cemento, mesas por grupos y mesa de maestra de estructura de hierro y tablero. Decoradas las paredes y aire acondicionado. Después, en el salón, la directora no presenta lo que hacen el centro y se establece una muy larga, agradable y constructiva plática entre nuestro grupo y las maestras, que dura más de dos horas. Después tomamos los productos que han preparado para comer todos y todas.
La experiencia ha sido maravillosa, qué amabilidad, cordialidad e interés profesional. Salimos con los correos electrónicos de todas las maestras, y ellas se quedaron con los nuestros.
Por otro lado, la otra parte del equipo de docente (junto con sus acompañantes) con Jesús Domingo a la cabeza (Catedrático de la UGR), con nuestra presidenta de la FAMPA y con nuestro representante del EOE, visitaron un centro de primaria, la escuela “Jerónimo Ahumada Armenta”. Equipo directivo y Felipe Reyes (Director de Primaria a nivel estatal de Baja California Sur) nos esperaban para recibirnos con la amabilidad y el afecto con la que nos han acogido durante toda nuestra estancia en el estado, un aspecto que destacamos y en el que todo el equipo de docentes coincidimos. Una pancarta inmensa nos invitaba a entrar a su escuela, llamándonos mucho la atención el mensaje que tenían situado en la puerta de entrada con el que los alumnos empezaban cada mañana, “Por esta puerta pasan los niños más inteligentes del mundo”. Lorena, la directora del centro, nos dio paso a la sala de profesores, donde nos explicó de forma muy detallada la ruta a seguir a lo largo de la productiva mañana; visita a las aulas, intercambio de experiencias entre profesorado y comida típica de la zona para “platicar”, como le dicen ellos, sobre nuestras primeras impresiones.
Recorrido fugaz por una de las clases de educación física y las clases de 1º y 2º grado de Primaria, donde nos llamó mucho la atención que aun siendo el último día lectivo, el número de alumnos superaba la treintena de media en todas las clases. Nos interesamos por el tema y de ahí nuestro primer foco de interés para la puesta en común ante la “plática”, una ratio de alumnos por clase “no definido” que supera en su gran mayoría los 40 alumnos.
Mientras tanto, en el patio exterior, una asociación sin ánimo de lucro y que visita de forma mensual todos los centros del sector, exponía el producto final de la llamada “Feria de la Ciencia”, cohetes fabricados por el alumnado, contenido que los niños y niñas trabajaron a lo largo del curso mediante experimentos con el objetivo prioritario de despertar el espíritu científico en ellos.
Llegó la hora del recreo, media horita que se alargó debido al interés que se despertó por nuestra visita. El grupo aprovechó para visitar el huerto escolar, con sus plantaciones de chile en su gran mayoría y los espacios exteriores, espacios dotados de merenderos, pista polideportiva, mini-bar con productos variados, campo de césped de fútbol sala y una pequeña alberca transitada por 3 pequeñas tortugas a las que bautizamos, con la ayuda del alumnado, con el nombre de España, México y La Paz.
Acaba el recreo y con ello los días lectivos de este curso escolar, jornada más corta de lo normal por nuestra presencia y con una gran tristeza, visible sobre todo, en el alumnado de 6º de Primaria, los cuales terminan su paso por esta escuela, ya que pasan a secundaria en otro centro y edificio.
Lorena, nos invita a pasar a una sala junto a la sala común o de profesores. Nos llama la atención, en primer lugar, la disposición que habían preparado en la sala, forma de U e intercalados con docentes de su escuela para así facilitar el intercambio de opiniones. Una vez allí, Karely, docente de la etapa de Primaria, nos explicó la Ruta de mejora del centro, similar a nuestro Plan de Mejora. Hay que señala el nivel socioeconómico bajo que presentan en la colonia, aspecto que pudimos comprobar en nuestro viaje de vuelta al hotel.
La noche manifestamos interés por visitar la zona de los Cabos, zona muy turística y donde se une el Pacífico con el Mar de Cortés. Pues al regresar al hotel tras la visita teníamos una camioneta (furgoneta) con chofer para llevarnos. Tomamos lo necesario para un posible baño y emprendimos la marcha. Una vez allí, no perdimos la oportunidad de darnos un paseo en barca desde donde pudimos vislumbrar las preciosas formaciones rocosas, pelícanos americanos y mejicanos y hasta leones marinos.
La vuelta al hotel fue pesada pero con recompensa final, cenamos en un distinguido lugar de la zona de la Paz, el famoso “Rancho Viejo”, donde pudimos probar comida típica de allí